JOSÉ CARLOS MAURICIO, consejero de Economía y Hacienda del Gobierno de Canarias

"Dije en verano que íbamos a hacer un plan de recuperación de la isla de Lanzarote, y lo vamos a hacer"

"Lanzarote tenía un déficit de políticos desde hace años. Nunca había visto políticos del nivel de los que me estoy encontrando ahora. Existe una especie de patriotismo conejero que está justificado"

10 de octubre de 2005 (12:02 CET)
Dije en verano que íbamos a hacer un plan de recuperación de la isla de Lanzarote, y lo vamos a hacer
Dije en verano que íbamos a hacer un plan de recuperación de la isla de Lanzarote, y lo vamos a hacer

A.A./Foto: Javier Fuentes

- Hace no demasiado tiempo estuvo usted en Lanzarote y se comprometió seriamente a corregir parte de la deuda histórica que tiene la Comunidad Autónoma con esta tierra. Para ello dijo que sus instituciones tenían que hacer un Plan Socioeconómico, para que no pasara lo de siempre, que no se daba el dinero porque no había proyectos a los que asignar las partidas. El trabajo ya está hecho. ¿Va a cumplir su promesa o se va a convertir en un Bienvenido Mister Marshall?

- La gente ha quedado muy contento. Se lo tendrá que preguntar a la presidenta del Cabildo y a todos los alcaldes. Cuando la alcaldesa de Arrecife, que es una luchadora terrible, ha salido contenta de la reunión para hablar del Plan de Dinamización Socioeconómica, eso quiere decir que no he venido con espíritu cicatero. Me he encontrado un excelente trabajo. Dije en verano que íbamos a hacer un plan de recuperación de la isla de Lanzarote global, y lo vamos a hacer. El Cabildo ha trabajado muy bien, sin parar de preparar documentación que recogía de los ayuntamientos. Hoy (ayer) recogía el doble plan: un plan de acción social para hacer frente al crecimiento enorme de la población de la Isla, que es un tema dramático porque se ha producido un crecimiento del 60 por ciento en muy pocos años, y un plan económico y medioambiental. Le puedo decir que ya está todo elaborado, que hay un proyecto muy amplio, y ahora vamos a crear una oficina técnica el Cabildo y el Gobierno de Canarias para hacer un seguimiento al Plan, para que haya cuatro personas que se dediquen a supervisar a diario lo que se hace, porque esos planes se hacen y luego se ejecutan. En el papel quedan muy bonitos y en luego se ejecuta una tercera parte. Creo que el Plan de Dinamización Socioeconómica de Lanzarote se va a ejecutar en más de un 90 por ciento de su totalidad.

- Cuando se le preguntó la otra vez por una cifra global que se podría incluir en este Plan habló de más de 300 millones de euros, por la cantidad que se va a invertir en La Palma. ¿Qué cantidad real es la que se estima invertir en Lanzarote y en qué tiempo?

- Vamos a cerrar en quince o veinte días todas las previsiones económicas; el plan social que afecta a 2006 y 2007 será de 100 millones de euros, que es una cantidad muy importante. Luego hay un plan económico de cinco años, que con inversión pública y privada, puede ser de 500 millones de euros en cinco años. ¿Le parece poco?

- No, me parece bien, porque en Lanzarote estamos muy necesitados de inversiones.

- Estamos hablando de 80.000 millones de pesetas. Está incluido los 100 millones del plan de acción social, más 300 que serán de inversiones de la Comunidad Autónoma y habrá unos 100 millones que serán de inversión privada.

- Esta vez las autoridades de Lanzarote han dado el do de pecho, se han portado muy bien. ¿Qué proyectos le han sorprendido más, cuáles cree que son realizables a corto plazo y cuáles cree que habrá que desechar?

- Tengo que decir que la gente de Lanzarote se ha portado extraordinariamente bien. La reunión que he tenido con todos los alcaldes, la presidenta y Luis Arráez, que ha sido el coordinador del plan, ha sido magnífico. El equipo de unión Lanzarote con el que he trabajado es de primera división, me ha llamado mucho la atención. Lanzarote tenía un déficit de políticos desde hace años. Nunca había visto políticos del nivel de los que me estoy encontrando ahora. Tenían todos los proyectos terminados, con su plan de ejecución, con su ficha financiera..., todo muy unido. Existe una especie de patriotismo conejero que está justificado; allí había gente de CC, del PSOE, del PP, del PIL, de los grupos independientes, y todo el mundo remando en la misma dirección. Antes llegabas a Lanzarote y veías que cada uno remaba para un lado, y la barca no iba a ninguna parte.

- En estos días se está hablando mucho de la posible desaparición del Régimen Económico y Fiscal (REF). ¿Realmente está en peligro como se dice, qué cambios se pueden producir al respecto?

- Estamos en la fase de negociación del REF. En su figura hay una parte que está consolidada, que es todo lo que tiene que ver con la imposición indirecta, y las figuras de imposición directa las tiene que aprobar la Unión Europea. La Unión Europea nos dio un plazo que ha acabado ahora. Llevamos siete años de REF, con Reserva de Inversiones, con Zona Especial, y ahora se trata de revalidarlo todo, de hacer una prórroga. Estamos tropezando con dificultades en Madrid y en Bruselas, pero me gustaría trasladar un mensaje de cierta confianza porque la batalla la vamos a ganar y vamos a ser capaces de mantener nuestras figuras históricas que son necesarias para que podamos modernizarnos y avanzando, haciendo planes como el de Lanzarote en el futuro. Al mismo tiempo quisiera encender una pequeña luz de alarma; si no nos movemos, si no nos unimos y apretamos, podríamos perder la batalla. Si estamos atentos en este tiempo que va de octubre a diciembre de este año, que es cuando vamos a negociar la prórroga primero con Madrid y luego con Bruselas, no creo que haya problemas para revalidar el REF. En Canarias hay una actitud un poco de exceso de optimismo; cuando el Real Madrid o el Barcelona juegan con un equipo de segunda división pensando que el partido está ganando sin jugar, pierden. Tenemos una sensación de que todo está hecho, de que todo es fácil... Hay que tener en cuenta que la Unión Europea está pasando por una crisis seria; la economía tampoco funciona bien, no hay tantos recursos como había antes, y ahora se discute todo. Si se habla de impuestos y de fiscalidad, lo que se está diciendo es que Canarias tiene un diferencial fiscal con España de 11 puntos. El ciudadano puede pensar que no es mucho, pero estamos hablando de 350.000 millones de pesetas al año. Esto es muy importante. ¿Por qué nos dan esa ventaja? Porque estar lejos genera una serie de desventajas que merecen ser compensadas. Lo que está en discusión es si seguimos teniendo el diferencial fiscal para que la economía funcione. En Europa todos los temas de fiscalidad están en discusión. Los alemanes están muy preocupados porque los impuestos en Chequia o en otros países son más bajos. Todo el mundo está nervioso con el tema de la fiscalidad, y si a nosotros nos cogen por delante nos destrozan el REF; hay que estar atentos, decirlo bien, justificar nuestra posición y convencerlos. Si Madrid puede ahorrarse dinero se lo ahorra, eso está claro. Lo que he hecho es tocar la campanilla para que todo el mundo esté atento, para que nadie se confíe.

- Antes hablaba de la importancia de la unidad que se ha encontrado en Lanzarote. ¿No es tan importante que en toda Canarias haya unidad política para defender un asunto tan importante como este?

- Esta semana informé en el Parlamento de este asunto, y pedí un consenso de todas las fuerzas políticas. Los socialistas se ofrecieron, y el PP creo que también, y digo creo porque tampoco les vi demasiado convencidos. Voy a presentar una comunicación en el Parlamento pidiendo apoyo para defender el REF. Cuando dije que había que tenía que tener cuidado en el PSOE y en el PP me tacharon de exagerado. Luego hay en Bruselas personas diciendo que la RIC beneficia a cuatro y hay ciudadanos que se lo creen. En diez años se ha materializado Reserva de Inversiones por valor de 9.000 millones de euros, a cerca de 1.000 millones de euros por año. Eso quiere decir que todos los empresarios canarios, desde el más pequeño al más grande, han reinvertido lo que no han pagado de impuestos.

- Se ha dicho también que en Europa empiezan a estar con la mosca detrás de la oreja con el tema del dinero de la Reserva de Inversiones de Canarias, la RIC, sobre todo porque no se reinvierte. ¿En qué medida le preocupa este asunto, no es verdad entonces?

- Es lo que le estoy diciendo. Si no hubiésemos tenido la inversión de 9.000 millones de euros, no se habrían hecho muchas de las cosas que se han hecho. Está demostrado y garantizado que eso es así. Si Canarias tuviera 100.000 millones de pesetas al año en esto, tendría que haber pagado al Estado 35.000. ¿Cuánto han reservado en realidad? 12.000 millones de euros, con lo que quiere decir que está pendiente de invertir 3.000 millones de euros. Ahí es donde hablo yo de la inversión privada para planes como el de Lanzarote. Este es un arma que sólo tenemos los canarios. Es verdad que Europa está con la pulga detrás de la oreja con el tema de la RIC, porque hay empresarios que en lugar de invertir lo que no paga en impuestos en crear puestos de trabajo se dedica a comprarse coches. Conozco a alguno que se han comprado cuadros y que lo han incluido como una mejora tecnológica. Es la Agencia Tributaria la que vigila esta cuestión, y lo hace bastante bien, porque estamos hablando de un impuesto de sociedades. Los empresarios canarios y los inspectores tienen unas broncas terribles, también porque falta un reglamento.

- Una estibadora del prestigo de la de Hernández Oliva se ha visto envuelta en un escándalo monumental después de ver cómo era víctima de una actuación cuanto menos sospechosa. Les concedieron en concurso público la posibilidad de instalar una nueva grúa en el puerto de Arrecife. Para su sorpresa, Arnáiz autorizó la colocación de otra grúa de la empresa que había perdido el concurso sin que lo supiera el Consejo de Administración. ¿No le parece un poco raro?

- Me gustaría que me diera ese expediente.

- Le podemos dar todos los datos, pero es cómo se lo cuento, porque todo está perfectamente documentado.

- Si ha habido una irregularidad, lo que habrá que hacer es mirarlo en el encuentro del Consejo de Administración que se celebrará el día 23.

- Se está diciendo que ese es un Consejo escoba que se celebra como paso previo a la destitución de Arnáiz.

- El PSOE no ha pedido la cabeza de Arnáiz en el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria, lo que ha pedido es tener mayor representación. Quieren participar más en la gestión portuaria. El problema lo justifica diciendo que hay un conflicto con Madrid, y es verdad, porque hay un enfrentamiento con el Ministerio de Fomento. Hay un conflicto entre la Autoridad Portuaria y Fomento por el plan de inversiones que podría afectar también al puerto de Arrecife, aunque me he comprometido a hacer lo posible para que esto no sea así. También hay un debate amplio sobre la deuda. En la pelea los socialistas dicen que va a ser en perjuicio del puerto, de ahí que propongan la renovación de varias personas. Se ha creado una comisión CC y PSOE y se está hablando de eso. Nosotros les hemos dicho que antes de hablar de cambios y de puestos hay que hacerlo de política portuaria. En eso estamos.

- En esa discusión existe también un asunto que no se aborda y que preocupa mucho a Lanzarote, la autonomía portuaria. ¿Cree que es un proyecto irrealizable teniendo en cuenta el crecimiento que se ha experimentado?

- A mí me parece bien que haya una autoridad portuaria en Lanzarote, como ahora tienen una Cámara de Comercio. Sin embargo, veo un peligro, que el puerto de Arrecife no tiene una alta rentabilidad. Para tenerla tiene que acometer un plan de inversiones muy fuerte. Si ahora se separa, alguien le puede decir que viva de sus ingresos. Lo más inteligente es que primero se haga el plan y luego se separen. El Plan de Dinamización del Puerto de Arrecife está garantizado, eso se lo aseguro, como lo está el Plan Arrecife Puerto Ciudad. Estos planes cambiarán la fisonomía de Lanzarote, se convertirá a la Isla en un escaparate internacional de gran altura. Estamos hablando de una operación extraordinaria, parecida a la que estamos intentando hacer en Las Palmas y que en estos momentos está bloqueada. Ahora están intentando recortar el Plan de Inversiones, y algo se va a recortar, pero no de Arrecife. Tenemos que intentar que en ese plan estén muy claras las inversiones, y después será rentable. A partir de entonces habrá que pedir la autonomía.

- Ya sabe que el pasado sábado se celebró el congreso de CC en Lanzarote. ¿Cree que es el punto de inflexión que se necesitaba para terminar con la profunda crisis abierta tras la marcha del PNL? Por cierto, que no le vimos por aquí; vimos a Fernando González, pero a usted no.

- Vengo mucho a Lanzarote, pero ese sábado tenía un compromiso con todos los alcaldes del sur de Tenerife para diseñar un plan para sacarles de la situación complicada en la que se encuentran. Uno va a donde tiene que ir, porque allí no me podía sustituir nadie, y aquí estuvo toda CC y medio Gobierno. El martes vuelvo a estar en el Consejo de Gobierno que se va a celebrar en Lanzarote. Me llevo muy bien con mis compañeros de CC en Lanzarote, pero el protagonismo lo tienen que tener gente como Mario Pérez, que ha sido elegido presidente, el consejero de Turismo, Manuel Fajardo, que es muy eficaz, y el resto del equipo. Me hubiera encantado venir, porque además tenía el compromiso con mi mujer, pero tuve la desgracia de tener que ir a trabajar.

- De cara a las próximas elecciones se habla de muchas cosas, entre otras de que ustedes van a tener fichajes de renombre como el del rector de la ULPGC, Manuel Lobo. Hay una atomización tremenda de las fuerzas nacionalistas y se habla de todo ¿Qué nombres están barajando ya, qué va a suceder en la campaña, qué alianzas van a hacer?

- Le doy una opinión personal y a lo mejor me equivoco, porque la política es una ciencia muy complicada. En Canarias hay tres fuerzas políticas: la primera es CC, la segunda es el PSOE y la tercera es el PP. Mi impresión es que va a seguir existiendo el mismo modelo. Todas las cabezas de ratón que hacen tanto ruido tendrán escasa incidencia en las elecciones, sobre todo con el sistema electoral que hay o con el que va a haber. Es como si en España se dice que se va a presentar el partido del no sé qué. Sabemos que no van a llegar a ninguna parte porque el mapa está muy cerrado. Después de muchos años de democracia, los mapas tienden a cerrarse. Los ruidos se hacen en los periodos de transición. Entre todos los partidos que hay tendrán uno o dos diputados en el Parlamento de Canarias. En las últimas elecciones pasó lo mismo, había mucho ruido, y luego vimos que hay cuatro grupos, con el PIL. El PIL está en una crisis y no se sabe si sobrevivirá, aunque ojalá sobreviva, porque esto del PIL y Lanzarote es una cosa muy especial. No sé quién se colará esta vez para ser grupo mixto.

- ¿Ese teórico grupo mixto va a decidir algo?

- Sí, para ellos sí, para tener el sueldo de diputado y las ventajas de los diputados. Ese rebumbio que hay no favorece a la política, sobre todo cuando la mayoría tenemos claro que hay tres partidos. CC es la primera fuerza, que puede pasar de 23 diputados a 20, o mantenerlos. Todo puede suceder.

- El optimismo aumentaría si se cambiara el sistema electoral, ¿no?

- (Se ríe) Lo gracioso de esta historia es que hablas con ellos y cada uno te dice que va a sacar siete u ocho diputados. De ilusión también se vive, y es bueno que los pobres tengan su ilusión. Luego llegan las elecciones y se quedarán todos arruinados, porque se gastan 40 o 50 millones para no sacar nada.

- No me ha contestado a lo del fichaje de Manuel Lobo.

- Tenemos fichado a Manuel Lobo y a muchos más.

- ¿Se sintieron aliviados cuando se marcharon?

- Más que aliviados. Tener que estar subiendo una montaña con un saco de 50 kilos de peso era horrible. ¿Quién no se siente aliviado cuando suelta el saco?

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