El sindicato denuncia la excesiva carga de trabajo y el poco interés de las patronales para evaluar este hecho. En Canarias hay 20.000 camareras de piso, de las cuales 2.000 laboran en Lanzarote. CCOO espera que el seguimiento de la huelga se aproxime al 80 por ciento.
La excesiva carga de trabajo que sufren las camareras de piso motivó a la Federación Canaria de Comercio, Hostelería y Turismo de Comisiones Obreras a convocar cuatro jornadas de paros a realizarse los días 24, 25 y 31 de diciembre y 1 de enero.
El sindicato exige una evaluación inmediata de los ritmos y cargas de trabajos, ya que una camarera de piso en seis horas debe limpiar al menos 20 habitaciones o apartamentos.
En Canarias hay unas 20.000 camareras de piso, de las cuales 2.000 laboran en Lanzarote. Comisiones espera que el seguimiento de la huelga se aproxime al 80 por ciento.
De momento, CCOO tiene sobre la mesa un calendario de asambleas de delegados en todas las islas con la firme intención de buscar el respaldo a la protesta, en el caso de que las patronales del sector no adopten las medidas correctoras oportunas.
El colectivo de camareras de piso lleva sobre sus espaldas el mayor número de bajas por enfermedad, enfermedades profesionales no reconocidas e invalidez total para su profesión. "Muy pocas son las que consiguen llegar a la ansiada jubilación después de toda una vida de sacrificio", dijo Manuel Fitas, secretario de CCOO para el sector de la hostelería.
750 euros
Las camareras de piso reivindicaron y alcanzaron en el pasado cercano mejoras salariales, sin embargo, por 750 euros de sueldo ha aumentado de forma alarmante la carga de trabajo como consecuencia de los recortes de plantillas.
Comisiones sostiene que el sector turístico no está en crisis, sino en recesión, por tanto subraya que es injustificable la drástica disminución de personal. En las trabajadoras se ha detectado situaciones de estrés y alteraciones piscosociales.
Seguridad laboral
Comisiones Obreras ha solicitado a las patronales la constitución de una comisión provincial de seguridad laboral que analice la necesidad de evaluar los altos ritmos de trabajo que desarrollan las camareras de piso en su jornada laboral, pero según advierte el sindicato, ha quedado demostrado la clara falta de sensibilidad y deseo de crear tal comisión.
La huelga entonces se presenta como una medida de presión para forzar y como un elemento de pleno derecho para lograr mejores condiciones laborales y una calidad de vida digna.
Comisiones subraya que particularmente la Asociación de Empresarios de Hoteles y Apartamentos de Lanzarote (Asolan) ha mostrado su predisposición al diálogo.
Factor en contra
El sindicato admite que la debilidad de la huelga puede estar dada por la gran cantidad de contratos temporales que tienen suscritos las camareras de pisos.
Esta situación podría engendrar temor entre las asalariadas, que verían amenazados sus puestos de trabajo en caso de secundar la protesta. Además, recuerda que si se quiere vender Canarias como un destino turístico competitivo hay que ofrecer servicios en consonancia y, en el caso de las camareras de piso, es imposible desarrollar un trabajo totalmente eficiente ante semejante carga de trabajo.
