"El pueblo de Mácher ha quedado dividido por la insensibilidad del Cabildo y del propio Gobierno de Canarias" con las obras en la carretera LZ-2. Eso es lo que ha denunciado Coalición Canaria de Tías en un comunicado, en el que carga contra ambas instituciones y critica que no se ha dado el mismo trato a ese tramo que al de San Bartolomé-Mozaga.
Según explica el concejal de CC Mame Fernández, el problema está en el tramo entre la rotonda de Puerto Calero y la de Mácher, "precisamente donde viven y transitan personas", que ha "empeorado" con las obras. El edil asegura que ha recibido quejas de los vecinos y usuarios de esta vía, "que manifiestan que se ha pintado una línea continua que no permite efectuar ningún giro en los puntos tradicionales, ni siquiera en la estación de servicios, teleclub e iglesia".
Por eso, el concejal reclama que "se restablezca la misma señalización vigente hasta el pasado jueves", al menos de forma provisional, hasta que la obra esté terminada definitivamente. Además, subraya que no se ha hecho ningún cambio estructural en la carretera, sino que "simplemente se ha reasfaltado", por lo que no se explica el cambio de señalización.
"Cambios sustanciales" en el proyecto
"No queremos analizar en profundidad la actuación que se ha efectuado, ya se hará en su debido momento, pero se advierten las improvisaciones que sobre esta obra se han realizado", advierte Mame Fernández, que de momento adelanta que hay "cambios sobre el proyecto original", que es "sustancialmente diferente", y cambios en el frente de expropiación". Además, apunta que se han colocado 66 farolas en el margen derecho, cuando el proyecto contemplaba que un tercio se situaran en el otro margen.
Según el edil, los vecinos reclaman que esta travesía de Mácher tenga el mismo trato que la de San Bartolomé-Mozaga, donde en la misma distancia tienen cuatro alternativas de giro, y no entienden "tanta historia para poner asfalto y llenar el margen derecho de farolas", "empeorando además las condiciones de uso y de seguridad".