La escasez de taxis en las paradas del aeropuerto de Guacimeta y el puerto de Los Mármoles ha vuelto a ser objeto de quejas en el sector turístico de la isla. La Asociación Insular de Empresarios de Hoteles y Apartamentos de Lanzarote (Asolan) ha criticado duramente la falta de vehículos en la recogida de pasajeros y ha lamentado la "mala imagen" que se ofrece a los viajeros, "pues las colas superan en algunos casos los veinte minutos de espera".
Asolan exige una "solución definitiva" a las administraciones responsables, reclamando a todos los ayuntamientos y al Cabildo que pongan fin a "este deficitario servicio". La patronal apunta a una mejor coordinación y ha instado a una solución "tan sencilla como prever el refuerzo de vehículos en días y horas claves para el desembarco o aterrizaje de viajeros, pero también refuerzo en las zonas turísticas que se quedan sin servicio de taxis en los días de fuertes llegadas por los trasladados al aeropuerto". "Solo se requiere voluntad, que hasta la fecha está ausente", cuestiona.
"Se debe avanzar hacia el futuro especialmente por la calidad de atención al turista y esta triste estampa de Lanzarote se repite con demasiada frecuencia. Los compromisos políticos deben materializarse en hechos que mejoren la acogida de quienes nos visitan", ha reclamado la presidenta de la patronal, Susana Pérez.
Y es que lamenta que los viajeros, sean turistas o residentes, "se ven obligados a permanecer a la espera durante largo tiempo ante la ausencia de este transporte, situación que genera tensos momentos entre los visitantes llegados tras un largo viaje". "O, sobre todo, entre los cruceristas, que disponen de menor tiempo para conocer la isla y regresar a su travesía", añade.
Según la presidenta de Asolan, "el turismo es un sector esencial para nuestra economía insular, por lo que es fundamental cuidar todos los detalles, entre otros los servicios públicos que también forman parte del servicio al turista, e inciden en proyección de nuestra imagen, especialmente cuando la situación no es desconocida en Lanzarote". Además, considera que ésta es una cuestión "de adaptarse a los cambios del mercado que en la actualidad dirige buena parte del turismo hacia Canarias".