El consejero socialista Andrés Stinga ha registrado este jueves su renuncia al acta en el Cabildo de Lanzarote, una decisión que adopta, según explica en un comunicado, “por motivos estrictamente personales”.
Stinga, que inició su andadura política en 1999, asegura que tras más de veinte años de compromiso con la vida pública “ha llegado el momento de abrir una nueva etapa personal y profesional”, aunque remarca que su vocación de servicio “permanecerá siempre”.
En su despedida, el exconsejero quiso expresar un agradecimiento especial a las trabajadoras y trabajadores públicos con los que ha coincidido tanto en el Ayuntamiento de San Bartolomé como en el propio Cabildo de Lanzarote. “De todos no sólo he recibido un trato excelente, sino que he encontrado predisposición, profesionalidad y colaboración, además de haber forjado amistades que conservaré siempre”, afirmó.
También ha trasladado su gratitud a los vecinos y vecinas de la isla por la confianza depositada en él durante estos años, así como a sus compañeros de partido y a sus adversarios políticos, con quienes asegura que siempre mantuvo una relación “cordial, fluida y respetuosa”.
Stinga ha recordado igualmente el papel de los medios de comunicación, a quienes ha agradecido el trato y el respeto recibido, y ha dedicado un reconocimiento especial a su familia por su apoyo incondicional en una etapa “no siempre fácil”.
“Concluye así una etapa importante de mi vida, que he afrontado con entrega e ilusión. En este momento inicio una nueva etapa y, aunque nunca se sabe lo que deparará el futuro, estaré siempre, en el lugar en el que me encuentre, con la misma disposición y vocación de servicio hacia mi isla”, concluyó.
