La esperada ampliación de las infraestructuras hospitalarias de Urgencias estará abierta antes de que el 2007 dé su último suspiro. Al menos, ésa es la expectativa que tiene el nuevo gerente del Hospital General, Román García Zerpa, que ha explicado que la fecha concreta dependerá de la llegada de los nuevos equipos médicos necesarios, técnicos y otros factores que hacen que los retrasos "no dependan de nosotros", afirmaba el doctor.
Y es que a tenor de los anuncios que este martes ha hecho el nuevo gerente, la llegada del año nuevo va a ser recibida con más alegría que nunca por los lanzaroteños, al menos, en lo que a mejoras en la Sanidad de la isla se refiere. Por su parte los gracioseros podrán dejar de acudir a revisar su salud a la Cofradía de Pescadores para hacerlo en su lugar correspondiente, en el centro de salud de La Graciosa, cuya obra será entregada al Servicio Canario de Salud a mediados de noviembre y abierta al público en los últimos días de 2007 o primeros de 2008. "Sería un estupendo regalo de Reyes", ha opinado la nueva directora del Área de Salud de Lanzarote, María José Costa, presente durante la comparecencia de Román García Zerpa.
El gerente también espera que para diciembre, el demandado endocrino para la isla se incorpore a su puesto y en los primeros días del año nuevo, lo haga un nuevo oncólogo que vendrá a acompañar al único especialista del área que en los últimos dos años ha estado en el Hospital de Lanzarote. Habrá que esperar por tanto dos meses para que se materialicen ambas incorporaciones, principalmente "por cuestiones familiares de traslado de los especialistas", ha puntualizado el gerente.
Lo que aún sigue pendiente es el comienzo de las obras de ampliación del centro de Salud de Playa Blanca. Según ha señalado el doctor García Zerpa, está listo el proyecto y el presupuesto para iniciar las obras, pero aún queda consensuar con los trabajadores del centro de salud su permanencia o traslado a otro edificio mientras duren las obras. Un traslado que, por el momento, parece difícil. "A nadie le gusta trabajar mientras se hacen obras, habrá que garantizar la seguridad de trabajadores y pacientes y ver qué se hace", consideraba el gerente, quien además ha informado de que el plan de trasladar las consultas al edificio de la estación de guaguas de Playa Blanca, por el momento no será posible.
Problemas de difícil solución
Las listas de espera continúan siendo uno de los caballos de batalla a los que toca enfrentarse nada más acceder a la gerencia del Hospital. Román García ha anunciado que "todo el personal de la gerencia" trabajará por reducir el tiempo de espera "en la medida de lo razonable" y ha concretado que el paciente podrá someterse a una intervención quirúrgica en un plazo máximo de seis meses. Por su parte, María José Costa ha puntualizado que en el caso de las consultas externas el plazo se intentará reducir a los dos meses de espera como máximo.
El gerente ha señalado que para conseguir este plazo, es necesario hacer de las consultas primarias una atención "más resolutiva", de tal forma que el médico de cabecera pueda pedir más pruebas desde su área para desahogar las consultas de especialistas.
Una de las causas de las listas de espera a la hora de recibir atención médica de un especialista es la falta de estos profesionales y para paliarla, los nuevos responsables de la Sanidad en Lanzarote contemplan continuar en la línea del anterior equipo, con la contratación de especialistas de fuera de nuestras fronteras, en concreto de países del sur de América.
Más humanidad
Otros proyectos anunciados por el gerente y que intentará poner en marcha de manera sucesiva serán los planes de humanización en la Sanidad, la informatización de las historias clínicas de los pacientes en el Hospital General, la puesta en marcha de la Unidad de Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) y la Unidad del Dolor.
Antes de final de año está previsto que ya comience la primera fase del plan de humanización hospitalaria con puntos de información en el Hospital General con el fin de que los pacientes y familiares que llegan a las Urgencias del centro, sepan a dónde dirigirse a través de una persona preparada para orientarles en esos momentos difíciles. Otra función de estos puntos de información, será sacar de la incertidumbre a los familiares que esperan mientras un ser querido es intervenido quirúrgicamente.
Por otra parte, el futuro de la cirugía es no tener que "abrir" al paciente para sanar su mal, por lo que el Hospital General pondrá en marcha la Unidad de Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) con el fin de que el paciente sea intervenido por la mañana "y por la tarde salga del hospital".
