FOTOS: Sergio Betancort
El alcalde de Haría, Marciano Acuña, y el primer teniente de alcalde, José Pérez Dorta, ofrecieron este jueves una rueda de prensa en la que hicieron un balance "positivo" de los cien primeros días de gobierno al frente del Consistorio norteño. Los representantes municipales trasladaron un mensaje de "unión" y de "estabilidad" entre los concejales de CC y Somos Lanzarote, incidiendo en la idea de "cambio tranquilo" que se prometió durante las elecciones, así como en "la necesidad de devolver el respeto al pueblo de Haría".
Respecto a la "situación heredada" de la Corporación anterior (a cargo de su ex compañero de partido José Torres Stinga), Acuña lamentó "la falta de gestión política y la escasa capacidad de maniobra fruto de un presupuesto agotado en muchas de las partidas y una rígida estructura económico-financiera, sometida a un Plan de Ajuste".
Para revertir esta situación y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, el nuevo grupo de gobierno asegura que ha tomado "medidas importantes, tales como incentivar el empleo a través de proyectos municipales que han dado trabajo a 11 personas en estos tres meses". Gracias a ello, defienden que se ha podido poner en marcha un primer plan de choque de limpieza.
"También se ha trabajado en normalizar las relaciones con otras instituciones y se ha avanzado en la solución del conflicto entre las navieras que operan en La Graciosa y en la problemática de los aparcamientos en el puerto de Órzola, creando una mesa de trabajo que comenzará su andadura el próximo 2 de octubre", agregan desde el grupo de gobierno.
En el plano educativo, han destacado "las gestiones realizadas por el Ayuntamiento, junto a padres y equipos directivos, para mantener los grupos de infantil de los colegios San Juan y La Garita, así como las reuniones mantenidas con el Gobierno regional de cara a garantizar la adjudicación del nuevo Instituto".
Por otra parte, agregan que "para atender a los vecinos como se merecen, el Consistorio norteño ha abierto las puertas a sus legítimos dueños, llevando a cabo una política más participativa, por ejemplo, en la organización de las fiestas en los distintos pueblos del municipio, motivando y poniendo en valor también la labor desarrollada por los empleados públicos".
Entre los retos que se plantea la nueva Corporación, el primer edil norteño ha anunciado la bajada del IBI en 2016 para aliviar la presión fiscal sobre los vecinos, el pago de la deuda con entidades bancarias y proveedores y la primera modificación y revisión del Plan General de Ordenación Urbana, así como un primer Plan Municipal de Inversiones.
José Pérez Dorta puso énfasis también en la necesidad de contar con un punto limpio en Haría, una reivindicación urgente y necesaria, así como en el proyecto para que el municipio acoja el centro insular de artesanía.