La Fundación César Manrique denuncia la masificación en Lanzarote: "Salvemos lo que nos queda"

"Lo único válido para ellos es el éxito de vender en masa y ganar millones, sin tener en cuenta todo lo realizado en los comienzos", denunció César Manrique en 1986

21 de febrero de 2024 (17:54 CET)
Actualizado el 21 de febrero de 2024 (20:26 CET)
La Fundación César Manrique denuncia la masificación en Lanzarote: "Salvemos lo que nos queda"
La Fundación César Manrique denuncia la masificación en Lanzarote: "Salvemos lo que nos queda"

La Fundación César Manrique ha denunciado en redes sociales la masificación que sufre la isla de Lanzarote. Con un vídeo elaborado por Sebastián Puiggrós se puede observar primero la frase del artista conejero: "Temblar de miedo al observar cómo nos destruyen y nos masifican".

Al inicio del vídeo se plasma el paisaje volcánico de Lanzarote, intacto, como el que aún se puede disfrutar en algunos espacios de la isla, como el Parque Nacional de Timanfaya. En el breve trabajo audiovisual, el entorno, comienza a menguar para convertirse en bloques de edificios y en viviendas adosadas, con palas y tractores, señales publicitarias y grúas de obras.

 

La frase del artista conejero data de 1986, pero ha sido recuperada 38 años después para exponer la situación en la que se encuentra la isla. Hace dos días, la Fundación César Manrique decidió posicionarse sobre los cambios anunciados por el Gobierno de Canarias y sobre el debate de recuperar suelo rústico para construir vivienda pública y pidió a la población que salve el suelo rústico, al grito de: "¡Salvemos lo que nos queda!".

El artista internacional César Manrique fue un gran activista medioambiental. Ya en 1965 expuso su preocupación por la "avalancha turística" que se avecinaba en la isla y ya 2023 se cerró con más de tres millones de visitantes. En su página web, la Fundación recoge una reflexión de César Manrique bajo el título Lanzarote se está muriendo. 

“La insensibilidad reinante unida a la falta absoluta de entusiasmo están aniquilando el amor que había en un principio. Lo único válido para ellos es el éxito de vender en masas y ganar millones, sin tener en cuenta todo lo realizado en los comienzos. Indigna que esta torpe facilidad de ventas al por mayor se base en todos los grandes atractivos que hemos creado en Lanzarote, ya que, de no existir estos, no venderían ni una perra chica. Esto es verdaderamente desmoralizador, es tirarse piedras sobre su propio tejado”, relató Manrique.

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