Con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, la Asociación Salud Mental El Cribo celebró el pasado sábado una emotiva gala en el Teatro Municipal de San Bartolomé, un evento que volvió a convertirse en un encuentro de compromiso, visibilidad y esperanza.
Desde las 19.00 horas, el teatro acogió a un público diverso compuesto por familiares, amigos, simpatizantes y profesionales que han acompañado a la Asociación a lo largo de los años.
La gala dio comienzo con las palabras de bienvenida de la presidenta de El Cribo, Rosa María González, cuya sensibilidad y entrega siguen siendo el motor de este proyecto que ya es referencia en la isla. Su intervención, profunda y comprometida, marcó el tono emocional de una noche inolvidable.
Seguidamente intervino Mónica de León, concejala de Igualdad y Juventud del Ayuntamiento de San Bartolomé, institución colaboradora clave en la organización de la gala. Su presencia simbolizó el respaldo institucional a la causa de la Salud Mental.
La música no podía faltar, y de la mano del grupo Invictores integrado por Leti, Javier, Miguel y Txelu, el teatro vibró al ritmo del rock, aportando energía y emoción con un repertorio que fue muy bien recibido por el público.
Uno de los momentos más significativos llegó con lectura del Manifiesto por el Día mundial de la Salud Mental, a cargo de Leticia Pardo y Juan Gabriel Quintana, miembros activos de El Cribo. Ambos ofrecieron, además una valiosa reflexión personal sobre la salud mental, conectando con todos los presentes desde la experiencia vivida.
La gala contó también con la participación del psiquiatra D. Julio Santiago Obeso, figura entrañable para la asociación. Aunque retirado de la práctica clínica su implicación con El Cribo sigue intacta. Creador del programa La Ovejita Negra, emitido durante muchos años en Radio Lanzarote, su intervención fue un testimonio cargado de humanidad, sabiduría y esperanza.
La escritora y fisioterapeuta Lorena Curbelo emocionó al público con la representación de su cuento En tu Mirar, una obra cargada de ternura y sensibilidad que invita a ver más allá de las apariencias, transmitiendo un mensaje de empatía y aceptación que tocó muchos corazones.
Uno de los momentos más esperados de la noche fue la proyección del videoclip oficial de la canción Ovejita Negra, con letra de Rosa María González y música de Arnold de Bonilla, que ya se ha convertido en un verdadero himno para quienes reivindican la diferencia, la autenticidad y el derecho a ser uno mismo.
Como colofón el Coro de El Cribo, dirigido por el propio Arnold Bonilla, interpretó en directo la canción Ovejita Negra. Fue un instante de profunda emoción colectiva: pacientes, familiares y colaboradores alzaron sus voces al unísono para recordarnos que la salud mental también se defiende cantando. El público, puesto en pie, despidió a los artistas con una calurosa ovación, cerrando así una gala que, como año, no es una gala cualquiera.
Desde aquí, nuestro más sincero agradecimiento a todas las personas e instituciones que hacen posible que El Cribo siga siendo un faro de humanidad, compromiso y esperanza.
