Sucesos

Operación Sombra Negra: veinte detenidos en Lanzarote en una macrooperación contra el tráfico de cocaína

Utilizaban el barco Telamón como plataforma de repostaje de las lanchas rápidas con las que acudían a altamar a recoger la droga

Operación Sombra Negra: Desarticulada una de las mayores redes de tráfico de coca en Lanzarote y otras islas

La Policía Nacional ha detenido en Canarias a 47 ciudadanos españoles y uno británico al desarticular una de las mayores redes de traficantes de cocaína procedente de Colombia y Brasil, que operaba con narcolanchas en Lanzarote, Gran Canaria y Fuerteventura. En el marco de esta operación policial se ha incautado 3.800 kilos de cocaína y se espera intervenir más.

Según ha podido saber La Voz, en Lanzarote se han detenido a 20 personas.El pasado martes se realizaron un total de 29 registros, en el marco de un amplio operativo policial. Lanzarote fue la isla donde se realizaron más registros, con un total de 14, seguida de Gran Canaria, con 13, y de Fuerteventura, con dos. 

En los registros policiales se incautaron aproximadamente 100.000 euros, droga destinada al tráfico a mediana escala, tres armas de fuego cortas, numerosa documentación y útiles destinados al tráfico marítimo como teléfonos satelitales y dispositivos de geolocalización.

También se han intervenido y bloqueado 69 vehículos -19 de ellos embarcaciones y motos acuáticas-, seis bienes inmuebles y numerosas cuentas bancarias de hasta nueve entidades distintas.

Esta organización estaba especializada en la introducción de grandes cantidades de cocaína en el territorio español a través de embarcaciones de alta velocidad, conocido como el sistema go fast.

 

Utilizaban el barco Telamón como plataforma de repostaje

Según ha informado la Policía Nacional en una nota de prensa, contaban con once lanchas rápidas, que partían desde puntos estratégicos del Atlántico, trasvasando la droga desde buques nodriza en alta mar hasta costas canarias a través de una sofisticada infraestructura marítima y logística

Utilizaban comunicaciones encriptadas, terminales satelitales y un lenguaje codificado para evitar ser detectados y dificultar cualquier investigación policial.

Además, la Policía Nacional pudo comprobar como se servían del barco Telamón, un pecio abandonado, como plataforma de repostaje para las embarcaciones o lanchas rápidas, pudiendo incluso localizar numerosas garrafas y petacas vacías que posteriormente trasladaban a dicha embarcación.

 

Una operación con la DEA, Europol y autoridades de varios países

Gracias a la colaboración con entidades como la National Crime Agency (NCA), Drug Enforcement Administration de Estados Unidos (DEA), Europol, Centro de Análisis y Operaciones Marítimas en materia de Narcotráfico (MAOC-N) y autoridades de Francia, Polonia, Portugal, Colombia y Cabo Verde, se logró desarticular esta red criminal con la detención de 48 personas como presuntas responsables de los delitos de pertenencia a organización criminal y tráfico de drogas.

El delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana; el jefe superior de Policía en las islas, Jesús María Gómez Martín; y el jefe de la Brigada Central de Estupefacientes (UDYCO), Antonio Martínez Duarte, informaron este viernes de la operación, denominada Sombra negra, dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número 3 y la Fiscalía Especial Antidroga de la Audiencia Nacional. 

Además, las investigaciones han permitido detectar que la organización criminal contaba con coordinadores en Canarias encargados de recibir y distribuir estupefaciente procedente de Colombia y Brasil. La investigación ha permitido intervenir, en lo que va de año, cerca de 3.800 kilos de cocaína a esta organización criminal.

Agentes de la Policía Nacional, con la colaboración de EUROPOL y otras autoridades policiales de distintos países, han llevado a cabo esta operación contando con instrumentos de financiación de la Unión Europea. Esta estrategia se enfoca en cuatro puntos clave: establecer un entorno de seguridad preparado para el futuro, combatir las amenazas emergentes, proteger a los ciudadanos europeos del terrorismo y la delincuencia organizada, y forjar un robusto ecosistema de seguridad europeo.