Política

El PP de Lanzarote se suma a VOX y condena la retirada de la cruz franquista de la plaza de Las Palmas

”Este acto supone un ataque injustificado a nuestras raíces cristianas y culturales”, manifiesta la presidenta de los populares de Lanzarote sobre el símbolo que fue levantado para recibir la visita de Franco en Lanzarote

Retirada de la cruz franquista en la plaza de Las Palmas. Foto: La Voz.

La presidenta del Partido Popular de Lanzarote y La Graciosa, Astrid Pérez, ha expresado este viernes su "indignación" ante el derribo de la cruz franquista de la plaza de Las Palmas, en Arrecife. El partido, que forma parte de los grupos de gobierno en el Ayuntamiento de Arrecife, en el Cabildo de Lanzarote y el Gobierno de Canarias, ha defendido que aunque la decisión se ampara dentro de la Ley de Memoria Histórica, este es un "símbolo cristiano que forma parte del diseño original". 

Pérez ha asegurado que la retirada de este vestigio franquista "ha conmocionado también a gran parte de la población lanzaroteña". “Como presidenta del Partido Popular de Lanzarote y La Graciosa lamento profundamente la retirada de la cruz de esta histórica plaza de nuestra capital”.  Pérez ha añadido que este hecho es el resultado de “una decisión tomada sin consenso ni respeto por la historia local”. La presidenta de los populares ha expresado que este hecho es “un ataque injustificado a nuestras raíces cristianas y culturales”.

En contra del criterio de la primera institución insular, de la que forma parte el Partido Popular y que ha asegurado que ni la cruz ni la placa volverán a colocarse en virtur de la ley de Memoria Histórica, Ástriz Péres ha mantenido que esta cruz "no contenía ninguna referencia franquista ni vulneraba la Ley de Memoria Histórica". Además, ha asegurado que "formaba parte del diseño original de la plaza realizado por el artista César Manrique y ha sido, durante décadas, un símbolo de identidad para los arrecifeños", aunque realmente fue una petición de la Delegación del Gobierno de la Dictatura al Ayuntamiento de Arrecife durante los años 50 para que estuviera lista para la visita del dictador a la isla.

“Me preocupa que se intente ideologizar un elemento religioso con el único fin de eliminarlo”, ha añadido Astrid Pérez. “Lanzarote ha sido siempre ejemplo de convivencia, y no podemos permitir decisiones que buscan dividir y enfrentar”.

Por parte de los populares de Lanzarote se ha exigido "respeto a nuestras tradiciones y la inmediata reposición de una cruz que no era franquista, sino que era de todos los vecinos de Arrecife".