El profesorado canario ha sufrido desde 2010 y hasta 2024 una "importante" pérdida de poder adquisitivo que se ha recrudecido debido a la inflación y a seguir arrastrando los efectos de la crisis económica de 2008, según ha denunciado este miércoles el sindicato STEC-Intersindical Canaria.
Así, cada vez es más difícil para los docentes canarios aceptar un puesto en Lanzarote, donde casi no hay viviendas de alquiler y las que existen, tienen precios más elevados que en la mayor parte del archipiélago.
En una rueda de prensa telemática, el sindicato ha detallado que los docentes de Secundaria, escuelas de idiomas y de arte -con una antigüedad media de 13 años- han perdido en este periodo de tiempo más de 53.000 euros entre los salarios mensuales y las pagas extra, pero que aquellos que llevan 35 años en ejercicio han podido dejar de ingresar cerca de 70.000 euros.
Según el liberado sindical de STEC-IC en Gran Canaria Emilio Armas, intentarán negociar con la administración autonómica para recuperar parte de esta pérdida de poder adquisitivo, señalando que lo ideal sería que en próximos años el incremento salarial para el profesorado superara el valor del IPC.
No obstante, ha admitido que, "dada la situación política actual" en el país, no son muy optimistas con que se pueda producir ese incremento salarial, ya que por la ausencia de presupuestos generales del Estado llevan desde 2023 con el sueldo congelado.
"Habrá que exigir a la Consejería alguna retribución, no que devuelva la cantidad perdida, pero sí que se acabe esta sangría que se va incrementando año a año", ha explicado Armas.
Esta pérdida del poder adquisitivo en lo que respecta a los salarios y complementos que dependen del Estado se suma al provocado por la falta de actualización de los complementos que dependen directamente de la comunidad autónoma.
El liberado sindical de STEC-IC en la isla de Tenerife Gerardo Rodríguez ha lamentado que estos complementos que dependen de la Consejería de Educación de Canarias no se han actualizado desde el 2018, año en el que se empezaron a abonar, ello pese a las peticiones reiteradas del sindicato al que representa.
Así, cobran al mes 35 euros por el complemento de tutorías, o 30 euros por los de coordinación de riesgos laborales, coordinación de tecnologías de la información y la comunicación (TIC) o por la de convivencia en el aula.
"Nos parece que están muy por debajo de las prestaciones que da el profesorado", ha criticado Rodríguez, quien ha agregado que hay otros complementos como los de patrimonio o de bienestar que no se abonan en Canarias, mientras que los sexenios "se han quedado obsoletos" y ni siquiera se cobran en el mismo mes en que se cumplen, sino que hay que esperar hasta enero del año siguiente.
El sindicalista ha ahondado en que esos complementos necesitan ser actualizados y "elevar sus ingresos de nivel hasta lo que le corresponda por el IPC canario", pero también teniendo en cuenta que el acceso a la vivienda en el archipiélago es difícil en ciertas zonas tensionadas, por lo que ha pedido que se lleve a mesa de negociación.
En cuanto al complemento específico, desde STEC han recriminado que no se cobra al 100% en el caso del profesorado canario, sino únicamente al 78 %, una situación que se viene arrastrando desde la anterior crisis económica, momento en el que quedó congelado.
Por todos estos motivos, y si no se producen avances en las mesas de negociación o en conversaciones con la Consejería de Educación, desde el sindicato no han descartado llevar a cabo movilizaciones para exigir los derechos del profesorado.
Movilizaciones, eso sí, que serían coordinadas con los sindicatos del resto del país una vez se presenten los resultados de este informe de pérdida de poder adquisitivo en el resto de comunidades autónomas.