La tripulación de un vuelo de Ryanair procedente de la ciudad inglesa de Manchester solicitó este martes presencia policial a su llegada al Aeropuerto de Lanzarote por una pasajera ebria a bordo que tenía una actitud conflictiva.
Según informan desde Controladores Aéreos en su perfil de X, los hechos ocurrieron sobre las 23.00 horas. La viajera, además, utilizó la violencia física.
Desde la torre de control recortaron todo lo posible la aproximación del vuelo RYR536Q para que aterrizara cuanto antes, al mismo tiempo que coordinaban la presencia de la Guardia Civil a pie de pista.
Finalmente, los agentes no detuvieron a la mujer, la cual iba acompañada por su familia y abandonó el avión sin ningún tipo de problema, según ha informado la Guardia Civil a La Voz.
Además, según han confirmado fuentes a La Voz, en este turno de noche en el Aeropuerto de Lanzarote solo había un agente de la Guardia Civil, quien pidió refuerzos al COS (Centro Operativo de Servicios de Las Palmas). Tras ello, se enviaron dos patrullas de Tías. Debido a esto, el municipio estuvo más de una hora sin tener ninguna patrulla al estar en el aeródromo.
Desde Controladores Aéreos han deseado "mucho ánimo a los tripulantes", ya que estas situaciones tan violentas cada vez son más comunes durante los vuelos.
De hecho, el pasado mes de agosto un pasajero fue condenado a 225 horas de trabajos comunitarios por el Tribunal Sheriff de Edimburgo, tras protagonizar una serie de comportamientos inaceptables durante un vuelo de Ryanair con destino a Lanzarote el 5 de julio de 2024 como publicó La Voz.