La supuesta aparición de una medusa gigante en Playa Honda este domingo, 10 de agosto, terminó siendo algo muy distinto. Según ha informado el gerente del Consorcio de Emergencias de Lanzarote, tras hablar con la persona que dio el aviso se comprobó que el animal no era una medusa, sino una puesta de huevos de un calamar diamante (Thysanoteuthis rhombus) de casi un metro.
La primera alerta motivó la activación de la bandera roja de forma preventiva. Sin embargo, finalmente ha resultado no ser una meduda. Las autoridades han recordado que, aunque en este caso no se trató de un animal peligroso para los bañistas, sí es importante informar de cualquier avistamiento inusual para garantizar la seguridad en las playas.
Esta estructura gelatinosa y cilíndrica puede contener hasta 70.000 huevos de calamar. A pesar de que la mayoría de especies de calamar colocan sus huevos amarrados al suelo, aprovechando los sebadales, esta especie de cefalópodo suele llevarlo flotando.