La Policía Local de Arrecife precintó a comienzos del mes de septiembre la parcela 536 de la empresa Hormiconsa Canarias S.A. en el barrio de Maneje. Este terreno se utilizaba como espacio de almacenamiento de escombros y tratamiento de residuos por parte de la constructora a pesar de estar contra la ley urbanística. Fuentes del consistorio han asegurado a La Voz, que también se ha precintado la maquinaria y que la propiedad tiene 30 días para restituir el terreno.
En septiembre de 2024, el pleno del Ayuntamiento de Arrecife aprobó sancionar a Hormiconsa Canarias S.A. por ejercer una actividad clasificada sin tener el título habilitante para ello y dejó sin eficacia la declaración responsable presentada por la empresa. Sin embargo, el cierre de la parcela no se produjo hasta un año después, este pasado 2 de septiembre tras detectar el consistorio "un error".
Según el expediente sancionador al que ha tenido acceso este medio, dos agentes de la Policía Local de Arrecife se presentaron en la calle Polígono 2 de Maneje para precintar la actividad de la parcela 536.
Los agentes alertaron a la propiedad que si volvía a poner en marcha la actividad, levantaba o rompía el precinto sin autorización del consistorio incurriría en una infracción muy grave y dar lugar a más sanciones administrativas.
Fuentes municipales, han asegurado que la propiedad dividió en tres una parcela única y que esto había complicado las labores de clausuras del terreno. Este cierre se produce tras un intento frustrado donde la Guardia Civil localizó que la parcela que se había mandado a cerrar no era realmente la que albergaba la hormigonera, la machacadora y las naves industriales ilegales.
Una infracción de 15.000 euros
Avalado en un informe técnico hace un año, el Ayuntamiento de Arrecife aprobó sancionar por una infracción muy grave con la menor multa posible para este tipo de casos: 15.001 euros a Hormiconsa Canarias S.A. El informe técnico resolvió que la actividad "no es legalizable" ya que contradice el Plan General de Ordenación y decretó la clausura del establecimiento.
El documento resaltó que había quedado acreditado que ni la actividad de tratamiento de residuos ni las instalaciones necesarias para ello estaban permitidas en la categoría de suelo donde se estaba desarrollando.
El cierre y la demolición de estas naves corre por los pasillos del Ayuntamiento de Arrecife desde más de una década, sin que se hubiera puesto fin a la actividad hasta ahora. Sin embargo, el denunciante del caso ha asegurado a este medio que aún continúan las máquinas trabajando en la parcela 351, a pesar del precinto.
Un "error"
Agentes del Departamento de Protección de la Naturaleza se trasladaron el pasado mes de marzo de 2025 para precintar la parcela 536. A su llegada, notificaron al consistorio que había un error y la parcela que realmente tenían que cerrar era la 351, donde estaba instalada la machacadora, y no la 536, que era donde la constructora acumulaba áridos.
"Ha habido un error, se ha subsanado inmediatamente abriendo un expediente de clausura, se ha enviado a la Policía Local y se procederá en su momento a traer al pleno la clausura de la 351, donde está la machacadora", resaltó el secretario del consistorio. Sin embargo, la parcela que finalmente se ha clausurado es la 536 y no la 351.
La parcela 351, donde se localiza la planta machacadora, las hormigoneras y las naves industriales, continúa abierta a pesar de que una sentencia judicial declaró su ilegalidad.
El dueño de Hormiconsa, Miguel Morales, fue condenado a un año y ocho meses de prisión y a una multa de 67.500 euros en una sentencia que fue confirmada por la Audiencia Provincial de Las Palmas en 2015. Este fallo, obligaba al promotor a derribar las naves, una planta de hormigón y una machacadora construidas de forma "ilícita" en 2005. Ese año, la empresa comenzó a desmontar las naves, pero siguió ejerciendo la actividad hasta la fecha.