Un conductor se topó durante la madrugada de este martes con una desagradable y cruel imagen en la parada de guagua de la entrada a Güime. Allí permanecía en el suelo un perro, atado a la parada con un cordón de zapatos y con una brida que le apretaba el cuello.
Este vecino cree que el animal fue atropellado y, posteriormente, abandonado en la zona. "Le pusieron una brida al cuello y le ataron para que se muriera ahí", afirma. El hallazgo se produjo sobre las 1.45 horas y en la zona quedaron restos de sangre.
Este vecino pensó que el animal estaba muerto, pero decidió bajarse de su vehículo para comprobarlo. "Me pegué un gran susto y cuando me acerqué vi que tenía una brida en el cuello y se la solté, porque se lo estaba apretando", explica.
Acto seguido, dio el aviso a la Policía Local, que recogió al animal y lo llevó a la perrera. "Tenía una pata partida", señala. Este martes por la mañana, este vecino se ha intentado enterar de la suerte que corrió este animal y le han explicado que "por lo visto la veterinaria está de vacaciones".
Por ello, asegura a La Voz que pedirá un permiso especial para que le dejen llevárselo a otro veterinario y pagar el tratamiento "de su bolsillo", antes de volver a dejarlo en la perrera.
