De los cuatro perros que Huella a Huella denunció que había encontrado en "condiciones penosas" en El Golfo, este martes al mediodía únicamente quedaban dos. Según ha indicado Huella a Huella, ése es el número de animales que hallaron los agentes de la Policía Local de Yaiza que se desplazaron al lugar, después de que esta asociación interpusiera su denuncia el lunes. Según explica esta protectora, esos dos podencos no se encontraban en mal estado de salud, pero habría otros dos cuyo paradero ahora se desconoce. Además, considera que estaban en un lugar "insalubre" y ha pedido que le sean "confiscados" al dueño hasta que disponga de un sitio "adecuado" para ellos.
Al hacer pública su denuncia, esta asociación criticó que había encontrado "trabas y pegas" para interponerla. Afirmaba que, debido a ello, se presentó un día después y, para entonces, algunos animales ya habían "desaparecido". Finalmente, la denuncia se presentó el lunes y la Policía acudió este martes, acompañada de una veterinaria y de la concejal del área de Protección de Animales, a inspeccionar el lugar.
Instalaciones "insalubres, inadecuadas y peligrosas"
Allí hallaron a estos dos podencos y "se constató que tienen chip y vacunas en regla, que no están desnutridos ni en mal estado de salud". Sin embargo, Huella a Huella apunta que, "aún así, obviamente, se ratificó que las instalaciones son insalubres, inadecuadas y peligrosas". Estos animales se encontraban en una suerte de cabañas de piedra, ubicadas en una zona volcánica de la localidad.
Tras esa visita de la Policía, la asociación ha pedido que el aérea de Protección de Animales del Ayuntamiento de Yaiza "confisque" a su dueño los perros, hasta que tenga un "lugar adecuado" para ellos. Esta protectora de animales ha "instado" también a la Concejalía a que se haga después un "seguimiento" de las condiciones en que viven estos animales.
Huella a Huella explica que este martes trató el caso "largo y tendido" con la concejal encargada de Protección de Animales y ésta les informó de que este miércoles se harían "averiguaciones" sobre el propietario del terreno. Según han indicado, la edil calificó como "chabolismo" las construcciones en las que se encontraban los perros y les aseguró que haría un "requerimiento" para que esas cabañas se "destruyan". Por su parte, Huella a Huella pidió que en ese requerimiento "se exigiera que cuanto antes esos animales fueran trasladados a mejores instalaciones, bajo seguimiento".
"Horas más tarde, gracias a asesoramiento externo, vimos que el artículo 20.1 de la Ley de Protección de Animales de Canarias contempla la confiscación de animales en el caso de encontrarse en ‘instalaciones indebidas’, por lo que instamos al área a actuar en ese camino y a sacar a esos animales de allí hasta que no se encuentre un lugar adecuado por parte del dueño", agregan. Huella a Huella señala que ahora se encuentra "a la espera de esas actuaciones".
