Soria, sabedor...

por RAMÓN PÉREZ HERNÁNDEZ Clásica la esperpéntica majadería del paradójico mandamás de turno en las islas grandullonas, pretendiendo siempre para ellas el number one. Lo mismo les da afluencia ...

10 de noviembre de 2005 (21:44 CET)

por RAMÓN PÉREZ HERNÁNDEZ

Clásica la esperpéntica majadería del paradójico mandamás de turno en las islas grandullonas, pretendiendo siempre para ellas el number one.Lo mismo les daafluencia turística,cruceros, comercio, puertos,quecatequizarse de la noche a la mañana y, en este caso,por hechizodel Sr. Soria, en los primeros del país en potabilizar agua de mar para consumo humano.Efectivamente, el Sr. Soria en epístola [Canarias7, pag.28, día 18-09-05, "El agua, objeto principal"] afirmó categórico..."tenemos una gran ocasión para compartir nuestra experiencia en materia de desalación de agua con muchos lugares del mundo. En Gran Canaria se ha hecho mucho en este terreno desde que en el año 1969 se montó la primera planta potabilizadora, no sólo de las islas, sino también de España. Fuimos pioneros en unos momentos en los que el problema del agua en el mundo aún no había adquirido la escala planetariaque hoy tiene"...

Pues bien Sr. Soria, el motivo de mi testimonio es para indicarle exactamente, que la primera planta potabilizadora de agua de mar para consumo humano instalada enlas Islas Canarias, Sahara, Ceuta, Melilla, Baleares, Península Ibéricay, quizás, Europa,sucedióen esta exsedienta islade Lanzarote, el jubiloso año de 1964, por iniciativa de los Hermanos José y Manuel Díaz Rijo, meritorios hijos de Lanzarote,con la eficaz colaboración de los sobresalientes isleños José Ramírez Cerdá (siendo Presidente del Cabildo Insular) y Ginés de la Hoz Gil (siendo Alcalde de Arrecife); es decir, Sr. Soria, ¡5 años! antes de que los entrañables gran canarios cogieran el recorte de esta islachinija. Tenga claro que me alegré cuando ustedes, los de Gran Canaria, calcaron en 1969, la sobresaliente instalación de potabilizadora ejecutadapor los conejeros en 1964, para aplacar la sed que se les venía encima. Espero Sr. Soria, que distinga conmigo la irrefutable maestría en temas de aguas de los lanzaroteños, que, durante milenios, hemos sobrevivido sin manantiales en éstarocosa Isla.

En cuanto al básico e inteligenteprograma de compartir experiencias conotras zonas del mundo, que usted encumbra con atinado criterio,me agradaríaque colaboraran en dichas jornadas técnicos de Lanzarote y de Fuerteventura, que, inequívoco, en el tema de potabilizadoras,tienen mucho que "compartir"...Por el bien de Canarias, no olvide, por favor, el acertado proverbio:"cuatroojos ven más que dos", aunque los 4 sean de islas chinijas...

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