Vaya sorpresa que me he llevado cuando he visto en los medios de comunicación nacionales y regionales, a un árbitro de la isla de Lanzarote. El amigo Alfonso Gil Medina es el protagonista de la campaña publicitaria que hace la Real ...
Vaya sorpresa que me he llevado cuando he visto en los medios de comunicación nacionales y regionales, a un árbitro de la isla de Lanzarote. El amigo Alfonso Gil Medina es el protagonista de la campaña publicitaria que hace la Real Sociedad para el final de temporada. No sólo se muestra su pasión por los colores txuri-urdines, sino que además lo hace rodeado de los bellos paisajes de la isla de Lanzarote.
La campaña promocional no le ha costado ni un euro a la isla de Lanzarote y hasta la fecha está teniendo una repercusión sin precedentes. En Donosti no se habla de otra cosa y todos comentan la existencia de un aficionado de la Real Sociedad que se encuentra a más de 2.600 kilómetros. Me consta que turistas vascos que se encuentran estos días de vacaciones en Lanzarote, se han acercado por La Geria para conocer en persona a Alfonso Gil y para disfrutar de los parajes naturales de la zona.
En menos de un minuto de vídeo, se muestran las maravillas de la zona sur de Lanzarote. El Charco de Los Clicos, Las Salinas de Janubio, Las Montañas del Fuego, La Geria o El Golfo, son algunos de los espacios que se muestran y que pueden ser disfrutados a través de las imágenes. Sin duda, se trata de una promoción de Lanzarote impagable y que a buen seguro reportará turistas en los próximos meses.
La pregunta que me hago es para qué sirven esas potentes campañas promocionales que realizan las instituciones públicas, tanto el Gobierno de Canarias, el Cabildo de Lanzarote o los diferentes Ayuntamientos de la isla. Se gastan cientos y cientos de euros, y muchas de ellas no encuentran la repercusión deseada.
Sin ir más lejos, hace pocos meses la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias se gastó un dineral en llevarse a 100 jóvenes de viaje por toda la geografía nacional y promocionar las Islas Canarias como destino turístico. No creo que esa campaña promocional haya logrado el éxito que ha conseguido Alfonso Gil, de manera involuntaria, con su afición a la Real Sociedad.
Y mejor no hablo de los sellos de calidad, "Water Sport Experience", "Family Welcome", "Wellness Delight" o "Volcanic Experience", que se ha inventado la consejera de Turismo del Gobierno de Canarias. No hablo de ellos, porque no tengo ganas de indignarme, de reflexionar sobre los miles y miles de euros que se han gastado en estas campañas y del poco éxito que están teniendo.
Una vez más, queda demostrado que son los ciudadanos de a pie los que verdaderamente hacen una promoción turística del lugar en el que viven. Son los trabajadores anónimos los que cierran importantes acuerdos para que miles de turistas lleguen a nuestra isla. Y que lo único que hacen los responsables políticos es llenarse la boca y echarse flores de las maravillas que realizan, cuando en realidad son otros los que consiguen los objetivos que se proponen. Por no hablar de los gastos que realizan en esas ferias internacionales.
Una simple campaña, y por modesta que parezca, tiene más éxito que una potente campaña en la que se gastan miles y miles de euros. Gracias Alfonso por acercar las excelencias de Lanzarote a Donosti. Y espero que el domingo a eso de las siete de la tarde estés celebrando el ascenso de tu equipo a Primera División.