Imagen: Sergio Betancort
Veinte años llevaban los equipos de la base del San José Obrero sin saborear las miles del triunfo. Un maleficio que se ha roto este fin de semana con la conquista del Campeonato de Canarias Cadete Masculino y que permite ser optimista de cara al relevo generacional. El San José Obrero ha completado un brillante Campeonato de Canarias y que se culminaba este domingo con la conquista del título de campeón.
El Campeonato de Canarias Cadete Masculino comenzaba para el San José Obrero en la noche del viernes. Los de Titerroy se medían al CB Somar, equipo que partía como favorito para llevarse el título, y que vio como el San José Obrero le empataba el partido. Los lanzaroteños comenzaban muy mal el partido con un parcial 0-8, fruto de los nervios del debut en una competición de estas características. Los pupilos de Pedro Noda se sobrepusieron a las adversidades y terminaron empatando el choque a 28 goles.
El juego del San José Obrero mejoraba en la segunda jornada en la que se imponía con claridad al Tenerife Perdoma por 37 a 24. Un resultado que le abría la posibilidad de luchar por el Campeonato de Canarias en la última jornada de la competición. Y así fue como en la mañana del domingo se imponían al Morro Jable por 39 a 27.
El equipo cadete del San José Obrero ha roto una mala racha que duraba 20 años de sequía y sin la posibilidad de conquistar ningún título de regional. Años en los que los equipos del San José Obrero han acudido a los Campeonatos de Canarias y siempre viniéndose de vacío. Se rompe un maleficio que duraba 20 años y comienza una nueva en el club del barrio de Titerroy. Un trabajo de cantera que tiene su recompensa y que se podría completar la próxima semana con el Campeonato Infantil que se celebrará en Lanzarote los días 27, 28 y 29 de abril en la Ciudad Deportiva Lanzarote.
El San José Obrero, club presidido por Juan Carlos Toledo, ha querido agradecer a la afición que se ha dado cita a lo largo de todo el fin de semana en los partidos que se han disputado en el Pabellón Municipal de Teguise. Una felicitación que hacen extensible a los monitores que durante años han estado y están trabajando en la base del San José Obrero. Unas categorías inferiores que comienzan a dar sus frutos y que permiten ser optimistas de cara al relevo generacional del balonmano lanzaroteño.
