Pablo Valle, vecino de Tías, ha enviado una carta a La Voz, que en realidad es un escrito dirigido al alcalde, José Francisco Hernández. En este documento, Valle critica que el Ayuntamiento haya retirado el local a los bomberos voluntarios de Tías, Boluntis. Ésta es su queja:
"Mi nombre es Pablo Valle y quiero hacerle llegar al alcalde de Tías esta carta, ya que en estos meses vengo siguiendo una situación crítica en nuestra isla y que ahora perjudica al pueblo de Tias. Por parte del Consistorio de Tías, se ha eliminado a los únicos bomberos de nuestro municipio.
¿Alguien se ha parado pensar sobre esta acción por parte del Consistorio? El Consorcio de Seguridad y Emergencias anuncia y denuncia que es incapaz de afrontar dos emergencias en la isla, ni en medios materiales ni personales. Cuando atienden una llamada o emergencia, no son capaces de afrontar una segunda al mismo tiempo.
Bien, esto deja en evidencia que el Plan de Seguridad y Emergencias de esta maravillosa isla es ineficiente y que, si por un casual los únicos bomberos de la isla están en una emergencia, yo debo saber que mi camión de bomberos está a 20 minutos o ocupado.
El ciudadano y el sector hotelero se ven claramente perjudicados, porque por parte del Consistorio están incurriendo en una negligencia y asumiendo una responsabilidad civil, que es inaceptable. Al final, yo pago mis impuestos y yo le pago el sueldo para que tome una decisión de patio de colegio.
¿En qué cabeza cabe que en un municipio de 20.000 habitantes se quite un camión de bomberos? Ese número es variable ya que en mi municipio hay hoteles con 1.500 camas. El sector turístico está desprotegido porque mis bomberos están en Arrecife y si no están ocupados.
¿Usted quiere decirme que si mi familia muere en un incendio es porque mis bomberos estaban en un servicio? ¿O que 300 o 1.000 turistas que se encuentran en un hotel tienen seguridad? Le digo una cosa, que no ocurra una desgracia, que nadie muera. Porque entonces da igual si son bomberos voluntarios o bomberos profesionales, son gente que acude a un llamada de ayuda.
Los que llaman al 112 están en peligro, heridos o su casa está ardiendo. Todavía no sé de nadie que llame al 112 para invitarlos a una fiesta, que es de donde parece que va para tomar las decisiones de "Bombero retirado".
Muchas gracias señor alcalde por darme una patada en el pecho y decir que está velando por mi seguridad".
