El Juzgado de lo Social número 1 de Arrecife ha acogido este martes la celebración del juicio por el despido de los Centros Turísticos del presidente del Comité de Empresa, Antonio Bonilla, que ha quedado visto para sentencia.
El despido de Bonilla de los CACT se produjo el pasado mes de noviembre como consecuencia de un expediente que se le abrió "por falta de sigilo profesional", según explicó entonces el asesor laboral de los trabajadores, Andrés Barreto, quien sin embargo acusó a la dirección de los CACT de "querer hacer desaparecer" al presidente del Comité de Empresa.
"El problema es que es Bonilla y hay unas elecciones sindicales próximas y una vez más los nervios les han confundido", señaló Barreto tras el despido, anunciando entonces que su cese sería denunciado en los Juzgados por considerarse nulo.
En concreto, según detalló en aquel momento el asesor legal de los trabajadores, a Antonio Bonilla se le acusaba a "de haber estado utilizando un expediente sancionador de una trabajadora de los Centros", en base "a un WhatsApp que Bonilla envió". Sin embargo, Andrés Barreto negaba que ese mensaje de Whatsapp hubiera partido del presidente del Comité de Empresa, sino que afirmaba que "ya estaba pululando", porque había "sorprendido" que "el mismo día que se envió el expediente al Comité de Empresa, esa persona falleció".
Un despido que unió a asociaciones, sindicatos y comités de empresa
El despido de Antonio Bonilla de los CACT desató una oleada de reacciones de apoyo por parte de asociaciones, sindicatos y distintos comités de empresa, hasta el punto de que un total de 15 organizaciones crearon una plataforma para denunciar la "represión" al presidente del Comité de Empresa de los CACT.
No obstante, al margen del juicio celebrado este lunes, en el que las distintas partes han expuesto sus versiones, la familia de la trabajadora de los CACT que falleció el pasado mes de agosto anunció que denunciaría en los Juzgados a Antonio Bonilla, afirmando entonces que la dirección de la empresa había actuado "previo requerimiento" suyo por entender que el presidente del Comité de Empresa había "cometido una falta muy grave por facilitar información confidencial".
