El Tribunal Supremo ha rechazado el recurso que presentó la Fundación César Manrique contra un auto del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, que en marzo de 2013 dio por buena la legalización del aparcamiento Islas Canarias y archivó el incidente de ejecución de la sentencia que declaró ilegal esta obra. La propia Fundación ha hecho pública esta resolución del Tribunal, que le fue notificada el pasado 14 de abril.
En el auto, dictado por la Sección Primera de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo, se razona que "si contra la Sentencia de la que trae causa el auto impugnado no cabía recurso de casación [interpuesto en su momento por la sociedad Aparcamiento Parque Islas Canarias S.A.] tampoco cabe contra el auto de ejecución recurrido, concurriendo la causa de inadmisión prevista en el artículo 93.2.a) de la Ley Jurisdiccional".
Asimismo, el Tribunal, en el razonamiento jurídico quinto, apunta que "al ser inadmisible el recurso de casación, las costas procesales causadas deben imponerse a la parte recurrente", aunque fija en "1.000 euros la cantidad máxima a reclamar por cada parte recurrida por todos los conceptos".
Contra la resolución adoptada por el Tribunal Supremo no cabe recurso ordinario, por lo que se cierra así este incidente de ejecución de la sentencia que anuló la licencia del Aparcamiento Islas Canarias.
Una nueva licencia
El pleito se inició cuando el Ayuntamiento de Arrecife, en el año 2002, tomó la decisión de destruir el antiguo parque obra de César Manrique para construir un aparcamiento subterráneo privado de 917 plazas, "en un procedimiento administrativo irregular que acabó siendo declarado ilegal por los tribunales", según subraya la Fundación.
Posteriormente, la FCM pidió la ejecución de esa sentencia. Sin embargo, a principios de 2012, cuando se estaba tramitando ese incidente de ejecución de sentencia, el Ayuntamiento de Arrecife le concedió una nueva licencia al parking Islas Canarias. Después, trasladó esa decisión al Juzgado, que decidió archivar el procedimiento que había abierto y dar por buena la legalización.
La Fundación César Manrique decidió recurrir esa providencia judicial, ya que entendía que no se había "ejecutado la sentencia en sus propios términos, sino que, por el contrario", se había "intentado eludir su cumplimiento". Sin embargo, primero el TSJC y ahora el Tribunal Supremo han rechazado sus recursos.
