Fotos: Sergio Betancort
Los vecinos de San Bartolomé después de 6 años y 9 meses volvieron a escuchar el repicar de las campanas, unas campanas que repicaban a fiesta ya que a las 10´30 horas daba comienzo la celebración de la Santa Misa presidida por el Obispo D. Francisco Cases y auxiliado por nueve sacerdotes concelebrantes. Los cantos musicales para este día tan especial corrieron a cargo de la Coral Municipal de San Bartolomé dirigida por Dña Carmen Siverio y el Coro de Vecinos Yágamo dirigidos por D. José Hernández contando con la colaboración especial de Guadarfía.
Los primeros bancos fueron ocupados por el presidente del Gobierno de Canarias Paulino Rivero, la consejera de Bienestar Social Inés Rojas, la directora general de patrimonio Aránzazu Gutierrez el presidente del Cabildo Pedro San Ginés, el alcalde de San Bartolomé, Marcial Martín y toda la corporación municipal, el director de cultura Juan Cruz, el vicepresidente del cabildo Fabian Martín, el parlamentario Mario Pérez la consejera de turismo, Carmen González y Manuel Perdomo el que fuera jefe de patrimonio del Cabildo.
Además de las autoridades, la iglesia estaba abarrotada por los vecinos que no quicieron perderse y ser partícipes de un día histórico para el pueblo.Al finalizar la Santa Misa, el clero presidido por el Sr. Obispo, autoridades y vecinos degustaron un aperitivo en la plaza junto a la iglesía donde todo eran felicitaciones de un lado y de otro.
Más de seis años cerrada al culto
Marzo del año 2004 la Iglesía Parroquial de San Bartolomé cerraba sus puertas al público por problemas de derrumbe en la techumbre.Seis años y nueve meses después vuelve abrir sus puertas mostrando una imagen impecable totalmente restaurada y respetando todo su valor patrimonial.
Una restauración que ha sido muy laboriosa en todos sus frentes, comenzado por los techos la parte más complicada ya que se tuvo que retirar toda la teja antigua que recubría las vigas y maderas para luego retirar las vigas y maderas que estaban partidas y algunas de ellas comidas por las polillas con el paso de los más de doscientos años de existencia.
Una vez retirado todo el material con desperfectos se recuperó lo máximo posible el resto dándole un tratamiento especial contra la polilla y la humedad y volviendo a revestir el techo con todas las tejas que se pudieron recuperar y el resto hasta completar el espacio se trajo de la ciudad de Valencia, tejas que habían sido retiradas de otros monumentos tan antiguos en el tiempo como la iglesía de San Bartolomé y que fueron restauradas.
También se aprovechó la restauración para canalizar el alumbrado y el equipo de sonido.La nave central contaba con tres altares dedicados a la Inmaculada, San José y El Sagrado Corazón de Jesús, estos altares hace ya algunos años fueron destruidos y tapiados, con esta nueva restauración se han recuperado dos de ellos esta vez como "Ornacinas con un marco Retablo", una obra maestra del joven artesano de San Bartolomé Isaac Ramos Luzardo.Estas ornacinas están ahora dedicadas a la Inmaculada y a San José.
Otra de las obras que se restauró ha sido el "Cuadro de Ánimas" una magistral pintura que estuvo a punto de perderse pero las manos maestras de la restauradora Sara Bosch lo ha hecho resurgir sin haber perdido su origen, eso sí, ganando ahora toda su visión para el disfrute de todos.
Los retablos del altar mayor y las capillas de Ánimas y la de Los Dolores, hoy día muestran todo su arte gracias a las manos expertas de la restauradora Beatriz Galán González una gran experta en esta materia la cual fue también la encargada de restaurar el cuadro que corona el retablo de la capilla de Los Dolores, un Nazareno de autor desconocido pero con una belleza sin igual.
En las paredes de la iglesia hay un nuevo "Vía Crucis" obra hecha artesanalmente por el pintor lanzaroteño Santiago Alemán Valls, donde se recogen los catorce pasajes de la vida, pasión, muerte y resurrección de Jesús. Por otra parte, el piso de la iglesía se conserva intacto una parte en piedra viva y la otra con losetas, este piso ha sido tratado con unos materiales especiales para no dañar su origen.
Para llevar a cabo toda esta restauración se contó con la participación del Gobierno de Canarias, Cabildo de Lanzarote, Ayuntamiento de San Bartolomé, Obispado de Canarias y las colaboraciones de los vecinos de San Bartolomé quienes se volcarón realizando galas, rifas, mercadillos solidarios e ingresos en cuentas bancarias.
La obra de mayor envergadura llevada a cabo en los techos, barnizados, encalados, pisos, etc. corrió a cargo de una empresa de un hijo de San Bartolomé el cual puso no sólo su buen trabajo si no además su entrega y cariño por su parroquia, Manuel Martín Betancort con su pequeña constructora Lanzamarbe.
La obras de restauración de la iglesia de San Bartolomé inmueble declarado Bien de Interés Cultural, que ha permanecido varios años cerrada para ser restaurada a través de un convenio entre las instituciones locales y el Ejecutivo canario, tienen una relevante importancia cultural, teniendo en cuenta que el objeto de este proyecto supone la conservación y puesta en valor de esta edificación que data del siglo XVIII, así como de sus bienes muebles, ya que también se han restaurado los retablos y el cuadro de "Ánimas", así como otros bienes muebles incluidos en la protección patrimonial de este templo.
El importe total de estas obras asciende a 500.00 euros, de los cuales 300.000 los aporta el Gobierno de Canarias, 100.000 el Ayuntamiento de San Bartolomé, 60.000 el Cabildo de Lanzarote y 50.000 la Diócesis de Canarias
