Velas, ramos de flores en el suelo y un mensaje muy claro: "Queremos que se haga justicia". Ése es el espíritu que ha reinado en la tarde de este martes en la calle Cid Campeador, en el barrio de San Francisco Javier, donde hace un año fue asesinado Roberto Martín. Un año después de su muerte, familiares, amigos y vecinos se han concentrado ante la puerta de su casa, donde fue asesinado, para recordar que su caso aún está por resolver.
"Roberto no te olvidamos. Tu familia y tus amigos quieren y piden justicia. Te añoramos. Sigues en nuestros corazones" y "No descansaremos hasta que se haga justicia. Te queremos Roberto" son algunos de los mensajes que podían leerse en los carteles que, con la imagen de Roberto, la familia ha pegado en la puerta del número 59 de esta calle, donde a las 17:30 horas, una treintena de familiares, vecinos y amigos se congregaron.
El hermano del fallecido, Víctor Martín, que fue precisamente quien aquel 24 de enero de 2011 encontró a Roberto tendido en el suelo tras ser apuñalado, ha dado un discurso en el que ha pedido justicia su hermano. "Lo único que pedimos es que los asesinos de mi hermano paguen", ha señalado Víctor, que insiste en que lo único que vio aquel día fue "a dos personas corriendo por la calle". "Pero estaban a unos 30 metros y no pude distinguirlos", ha añadido el hermano de Roberto, quien lamenta no haber salido ese día a la calle "diez minutos antes". "Entonces los habría visto", ha añadido.
A pesar de que hace un año de su fallecimiento, la familia asegura que no "sabe nada" de la investigación. "No tenemos ni una pequeña pista, ni ha habido detenidos ni nada. Ni el juez se ha puesto en contacto con nosotros", ha manifestado Víctor Martín, quien ha afirmado que lleva "por lo menos dos meses" que no sabe nada de la policía y que sabe que "el sumario está abierto". "Mandamos un escrito a la Fiscalía para poder recoger las pertenencias de mi hermano y no hemos tenido ni respuesta", ha señalado.
Según ha asegurado Víctor Martín, la Policía Nacional ya realizó la investigación, la cual se encuentra ahora en manos del juez. "Yo fui el que lo vio, el que se mamó todo y es triste que no sepa nada de lo que ocurrió", ha señalado. "Yo creo en la justicia, porque si no uno se volvería loco, pero estoy viendo que esto se va a ir a un cajón como se han ido otros asesinatos en Lanzarote", ha añadido el hermano del fallecido.
El caso se encuentra en el Juzgado de Instrucción número 4 de Arrecife aunque, al contrario de lo que asegura Víctor, la Policía Nacional afirma que sigue bajo secreto de sumario.
En cualquier caso, la familia de Roberto Martín tiene la esperanza de encontrar alguna respuesta tras esta concentración. "Yo espero que después de esto llamen o hagan algo", ha manifestado Víctor, quien ha añadido que, en caso contrario, seguirá presionando. "La próxima vez no me concentro aquí, hago una caminata o voy a los Juzgados, lo que sea".
"Nunca vimos pleitos aquí"
Roberto Martín falleció dos días después de ser apuñalado en la puerta de su domicilio. Entonces, se barajaron mucha hipótesis y se llegó incluso a hablar de un posible ajuste de cuentas. Un hecho que la familia niega rotundamente. "Era un chico tranquilo, una persona normal y nunca vimos pleitos aquí".
"Era un chico joven y bueno", ha señalado por su parte el cuñado de Roberto, Orlando Barrero, quien ha insistido en que el "no se metía con nadie, ni tenía ningún problema. "Era una persona tranquila, que arreglaba sus cochitos, porque era muy apañado para eso y ya", ha añadido este hombre, que también se encontraba este martes concentrado ante la puerta de la casa de Roberto. "Por lo menos que cojan a los culpables o que hagan algo, porque si siguen por ahí pueden volver a hacerlo".
