Agentes del Equipo Territorial de Policía Judicial (ETPJ) de la Guardia Civil de Tías investigaron el pasado día 31 de enero a un joven de 22 años de edad de iniciales H.A.E.E., sin antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de abuso sexual a un menor de edad mediante la modalidad denominada "sextorsión".
Según explican desde la Benemérita, la sextorsión, o chantaje con fines sexuales, es una forma de explotación sexual en la cual una víctima, que previamente ha intercambiado archivos digitales (imagen o vídeo) de carácter íntimo -en las que pueda aparecer desnuda o manteniendo relaciones sexuales- con el presunto auto, con el que ha entablado una relación a través de las redes sociales o servicios de mensajería instantánea, es obligada a entablar relaciones sexuales, enviar nuevas imágenes íntimas, entregar dinero o cualquier otra prestación con el fin de evitar la difusión de dichas imágenes entre la red de contactos que pueda tener con fines de que se haga viral mediante sexting.
La investigación comenzó a finales de enero, cuando los progenitores de la víctima denunciaron los hechos en dependencias de la Guardia Civil, informando a los agentes de que una persona ?que se hizo pasar por mujer para ganar la confianza de su víctima- amenazaba a su hijo menor de edad con publicar una serie de fotografías de carácter íntimo de aquel si no mantenía relaciones sexuales con él, intentando quedar con él en un centro comercial de la isla para concretar un encuentro sexual.
Con los datos aportados por los padres, los agentes comenzaron las correspondientes pesquisas para localizar al presunto autor del delito, pudiendo identificarlo y detenerlo el citado día 31 por un delito de abuso sexual a menores de edad. El detenido ha pasado a disposición del correspondiente Juzgado de guardia de Arrecife.
Penas de prisión y multas
Desde la Benemérita explican que, dependiendo si la víctima es menor de edad o no, el autor de este delito puede enfrentarse a diferentes tipos de condena, siendo el denominador común las penas de prisión y las multas, además de diferentes ordenes de alejamiento o prohibición de comunicarse con la víctima.
La víctima en estos casos es coaccionada a tener relaciones sexuales con alguien, entregar más imágenes eróticas o pornográficas, dinero o alguna otra contrapartida, bajo la amenaza de difundir las imágenes originales si no accede a las exigencias del chantajista.
Prevención
La Guardia Civil lleva a cabo distintas actuaciones para concienciar a padres, docentes y alumnos de la existencia de estos delitos y la importancia de denunciarlos. En este sentido, apunta que es aconsejable no proporcionar o compartir imágenes privadas o comprometedoras a través de las redes sociales y no agregar a personas que no se conozcan ni creer todo lo que dicen, ya que en Internet y en las redes sociales no todo el mundo es quien dice ser.
La Benemérita explica que en los juegos online también hay riesgo de que aparezca algún acosador y recomienda a posibles víctimas si alguien les extorsiona en las redes sociales, que no cedan al chantaje, que se lo cuenten a sus padres, profesores o adultos de confianza y, si el tema es grave o delictivo, que lo pongan en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
