Los hechos ocurrieron el pasado miércoles, 17 de febrero, a las 16.45 horas, cuando las calles de la capital estaban medio vacías debido a la alerta naranja anunciada por el Gobierno canario.
Tras el requerimiento de varios conductores que pasaron por la comisaría para denunciar que un individuo estaba intentando romper la puerta del establecimiento, un agente de la Policía local de Arrecife acudió al lugar de los hechos, "observando a su llegada que había un individuo asomando la cabeza por el cristal fracturado de la puerta del establecimiento e intentando salir del mismo".
Según el informe de la Policía, "seguidamente se personan en ellugar el resto de policías destinados en el Grupo 1 que, junto al agente antes señalado, consiguen reducir al autor de los hechos, el cual ofreció resistencia". Una vez reducido el presunto autor del robo, los agentes pudieron observar frente al establecimiento el cajón portamonedas perteneciente al mismo, así como una de las tapas de alcantarilla, encontrándose otra tapa en el interior del establecimiento, la cual había sido usada para fracturar el cristal de la puerta de acceso. "Un papel pegado a dicho cristal con la marca de la suela de dicho individuoterminaba de dibujar el escenario del supuesto robo".
El presunto autor de los hechos fue detenido para ser trasladado posteriormente al Centro de Salud de Valterra, ya que además del estado de nerviosismo, tenía diversos cortes en la mano derecha. Posteriormente, los agentes lo trasladaron a las dependencias de la Policía local en Arrecife.
Intento de robo en Zara
Por otro lado, la Policía local de Arrecife ha detenido a un segundo individuo, menor de edad,tras intentar robar en el establecimiento comercial de Zara, situado en la calle León y Castillo de Arrecife.Los agentes fueron requeridos por una dependienta del mencionado local comercial, después de que el vigilante de esta conocida tienda de ropa retuviera a un individuo intentando llevarse diversos artículos sin abonar el importe correspondiente a los mismos.
Tras realizar el cacheo superficial, al menor se le incautan dos prendas de vestir, mientras que en el suelo del probador, los agentes se encontraron además varias etiquetas de prendas de ropa, así como cinco dispositivos de alarma forzados. Los policías procedieron, por último, a la detención del menor tras la denuncia interpuesta por la empleada y el vigilante del establecimiento.
