¿Cuándo podrá Lanzarote reducir su nivel de alerta?

​Aunque varios indicadores han bajado en la última semana, el camino a recorrer aún es muy largo. La Voz analiza cómo está cada parámetro y hasta dónde tendrían que reducirse para salir de la alerta 4

4 de febrero de 2021 (22:45 CET)
Actualizado el 5 de febrero de 2021 (13:20 CET)
Labores de desinfección de la UME en el Hospital Molina Orosa durante la tercera ola del coronavirus
Labores de desinfección de la UME en el Hospital Molina Orosa durante la tercera ola del coronavirus

La incidencia acumulada ha bajado un 18% en Lanzarote en los últimos diez días (el 25 de enero sumaba 793 casos nuevos por 100.000 habitantes en 14 días y este jueves la cifra está en 648), pero la isla aún tiene un largo camino por recorrer para reducir su nivel de alerta.

De momento, el Gobierno de Canarias acaba de prorrogar el nivel 4 en Lanzarote durante una semana más, pero será difícil que la isla llegue a la próxima revisión -fijada para el jueves 11 de febrero- con los indicadores que se requieren para bajar la alerta. De hecho, de mantenerse el ritmo actual, las restricciones que están en vigor podrían extenderse durante bastante más tiempo.

Los indicadores que marcan el nivel de riesgo fueron definidos hace meses por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, y Lanzarote sigue duplicando con creces la mayoría de ellos.

En total, los parámetros que se tienen en cuenta son ocho, divididos en dos bloques. Y para cada uno se establecen los límites que califican el riesgo como mínimo, bajo, medio, alto o muy alto. En caso de tener en riesgo muy alto al menos dos de los seis indicadores del bloque I y uno del bloque II (que es el que marca la presión hospitalaria), se establece el nivel 4 de alerta, que solo se rebaja cuando se revierte esa situación (es decir, no teniendo en riesgo alto ningún indicador del bloque II o teniendo menos de dos en el bloque I).

En el último informe detallado de Sanidad, Lanzarote sigue teniendo cinco indicadores en riesgo máximo (cuatro del bloque I y uno del bloque II), además de otros dos en riego alto. Y todos los que están en la zona crítica, siguen muy lejos de reducir las cifras hasta el límite necesario para descender un nivel.

 

Incidencia acumulada en 14 días, en riesgo muy alto

Este jueves se sitúa en 648 casos por cada 100.000 habitantes, cuando la calificación de riesgo muy alto empieza a partir de 250. Es decir, que la isla aún tendría que bajar la incidencia casi un 63% más solo para pasar a nivel 3, que sigue siendo de riesgo alto.

Traducido al número de casos diarios, esto supondría volver a registrar menos de 27 diagnósticos de media por jornada, que es un dato que no se da desde principios de enero. La cifra este jueves ha sido de 59 y el miércoles de 52. Así, aunque se ha alejado de los picos de más de 120 casos en un día que llegaron a registrarse las dos semanas anteriores, sigue muy lejos del objetivo.

Además, para bajar después del nivel 3 (que es en el que está actualmente Gran Canaria y que también implica importantes restricciones) al nivel 2 (riesgo medio), la incidencia en 14 días tendría que ser de menos de 150 casos por 100.000 habitantes en 14 días, lo que supone una media máxima de 16 casos diarios.

El siguiente nivel, de riesgo bajo, está entre 25 y 50 casos nuevos por 100.000 habitantes en 14 días (lo que para la población de Lanzarote supone una media de entre entre 2 y 5 casos diarios) y el riesgo mínimo en menos de 25 (menos de 2 diarios).

 

Incidencia acumulada en 7 días, en riesgo muy alto

Lanzarote acumulaba este jueves 252 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días, cuando el riesgo muy alto se establece a partir de 125. El siguiente nivel, de riesgo alto, está entre 75 y 125, el riesgo medio entre 25 y 75, el bajo entre 10 y 25 y el riesgo mínimo en menos de diez.

La traducción en número de casos diarios es idéntica a la que se establece para la incidencia acumulada en 14 días, es decir, Lanzarote está en riesgo muy alto por encima de 27 casos por día, en riesgo alto cuando pasa de 16, en riesgo medio cuando supera los 5 casos diarios y el riesgo bajo cuando tiene entre dos y cinco por jornada.

El motivo de que se tengan en cuenta estos dos parámetros es poder para ver la evolución en un periodo de tiempo mayor o menor. Cuando la transmisión del virus empieza a reducirse, el primer indicador en bajar es el de la incidencia en siete días.

 

Incidencia acumulada en mayores de 65 años en 14 días, en riesgo muy alto

Éste ha sido uno de los peores indicadores en Lanzarote en esta tercera ola de Covid y aunque las cifras se han reducido en la última semana, siguen siendo preocupantes. 

El nivel de riesgo muy alto se establece a partir de 150 casos en mayores de 65 años por cada 100.000 habitantes de ese grupo de edad en 14 días, y el último dato de Lanzarote se sitúa en 586,71, multiplicando casi por cuatro esa cifra.

El riesgo alto se fija entre 100 y 150, el riesgo medio entre 50 y 100, el riesgo bajo entre 20 y 50 y el riesgo mínimo en menos de 20.

 

Incidencia acumulada en mayores de 65 años en 7 días, en riesgo muy alto

Al mirar la tendencia de este indicador en los últimos siete días en Lanzarote, se nota una clara mejoría respecto a la semana previa, ya que ha bajado a 197,45 casos por cada 100.000 habitantes en siete días (sumando la semana anterior, la media diaria sale a casi 42 casos por 100.000 habitantes de ese grupo de edad al día, y ahora ha bajado a 28).

No obstante, aún así este indicador también sigue muy lejos de bajar de nivel. El riesgo muy alto se establece a partir de 75 en siete días, cuando actualmente hay 197. Entre 50 y 75 se considera riesgo alto, entre 25 y 50 riesgo medio, entre 10 y 50 riesgo bajo y con menos de 10 riesgo mínimo.

 

Positividad, en riesgo alto

Este indicador es el que marca el porcentaje de pruebas que dan positivo sobre el total de las realizadas, y según los criterios fijados por la Organización Mundial de la Salud, no debería superar el 5%. En el caso de Lanzarote, lleva semanas muy por encima de ese porcentaje, aunque en este indicador no llega al nivel de riesgo máximo. No obstante, este jueves se acercaba peligrosamente a ese límite.

El nivel de máximo riesgo está fijado a partir de un 15% de positividad, y el último día en Lanzarote subió hasta un 14,6%. Tal como ya ha informado La Voz, el miércoles fue el día en el que menos pruebas se hicieron en la isla desde principios de enero, con 295, frente a las más de 700 que se llegaron a hacer algunos días de la pasada semana.

En los últimos 7 días, según los datos de la Consejería de Sanidad, la media de positividad en Lanzarote se sitúa en un 10,1%, que supone un nivel de riesgo alto. El riesgo medio está entre el 7 y el 10%, el riesgo bajo entre el 4 y el 7% y el riesgo mínimo en menos del 4%.

 

Trazabilidad, en riesgo mínimo

Es el indicador más favorable en Lanzarote, y también el único en el que está mejor que el resto de las islas de Canarias. La trazabilidad se define como el “porcentaje de casos asignados a un brote mediante seguimiento, excluyendo el caso índice”. Es decir, mide el porcentaje de contagios en los que se consigue determinar su origen, y por tanto evalúa también las labores de rastreo.

En el último informe de la Consejería de Sanidad, la trazabilidad en Lanzarote se situaba en el 84%, frente al 79,8% de media de Canarias.

Éste es el único indicador que se encuentra actualmente en Lanzarote en el nivel de “riesgo mínimo”. El riesgo mínimo se establece cuando la trazabilidad supera el 80%, y para llegar a un riesgo alto o muy alto hay que estar por debajo del 50% o del 30%, respectivamente.

 

Ocupación de camas en planta con pacientes Covid, en riesgo alto

Éste es uno de los dos indicadores incluidos en el bloque II, que es el que mide la presión hospitalaria. Y tiene especial importancia de cara a establecer el nivel de alerta. Para entrar en nivel 3 o en nivel 4, al menos uno de los indicadores de este bloque (que son la ocupación de camas en planta y la ocupación de camas en UCI) tiene que estar en ese mismo nivel de riesgo.

En el caso de Lanzarote, los dos estaban hasta la pasada semana en el máximo nivel, de “riesgo muy alto”, aunque ya desde el pasado 28 de enero mejoró la situación en planta, que ha bajado a “riesgo alto”.

En el último informe de Sanidad, el número de camas ocupadas en el Hospital Molina Orosa con pacientes de Covid se situaba en el 10,73%, cuando la pasada semana se llegó a superar el 16%.

En este indicador, el riesgo muy alto se establece a partir del 15%, el riesgo alto entre el 10 y el 15%, el riesgo medio entre el 5 y el 10%, el riesgo bajo entre el 2 y el 5% y el riesgo mínimo por debajo del 2%

 

Ocupación de camas en la UCI, en riesgo muy alto

Éste es el indicador del bloque II que mantiene a Lanzarote en alerta 4, y además duplica el límite que marca la entrada en este nivel. El documento del Consejo Interterritorial de Sanidad fijó el riesgo muy alto a partir del 25% de ocupación de las camas en Unidades de Cuidados Intensivos con pacientes Covid, y en el último informe de Sanidad la ocupación de la UCI se situaba en Lanzarote en el 52,78%.

Además, para calcular ese porcentaje se han tenido en cuenta las camas que se han habilitado con los planes de contingencia en el Hospital, ya que en realidad el Molina Orosa solo cuenta con 10 camas de UCI, y este jueves tenía 21 pacientes críticos ingresados.

Para bajar un nivel (a riesgo alto), la ocupación tendría que estar entre el 15 y el 25%, mientras que el riesgo medio se sitúa entre el 10 y el 15%, el riesgo bajo entre el 5 y el 10% y el riesgo mínimo por debajo del 5%.

Aunque en la última semana el número de pacientes hospitalizados en planta ha descendido con respecto a la semana anterior, no ha ocurrido lo mismo con el de ingresados en la UCI, que ha seguido creciendo. Además, este parámetro suele ser el que más tarda en descender, ya que los pacientes que llegan a esta unidad tardan de media unas cuatro semanas en recibir el alta, y algunos han pasado incluso más de dos meses.

Por eso, este indicador puede ser uno de los que más retrase el cambio de nivel de alerta de Lanzarote. Mientras no baje a menos de la mitad, se necesitaría reducir al menos tres parámetros del otro bloque -que actualmente tiene cuatro en máximo riesgo- para poder pasar a nivel 3.

En todos los niveles de alerta establecidos en España, el esquema es el mismo. Se entra en el nivel uno cuando hay al menos dos indicadores del bloque I y uno del bloque II en nivel de riesgo bajo; en nivel dos cuando hay dos del bloque I y uno del bloque II el riesgo medio; en alerta 3 cuando hay dos indicadores del bloque I y uno del bloque II en riesgo alto; y en alerta 4 cuando hay menos dos del bloque I y uno del bloque II en nivel muy alto, que es la situación en la que continúa Lanzarote desde hace ya tres semanas.

 

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