La semana pasada, el Partido Nacionalista de Lanzarote presentó una moción en el Ayuntamiento de Arrecife en la que pedían un informe técnico urgente sobre las obras de la nueva piscina municipal debido a que ésta "pudiera no estar haciéndose correctamente".
La respuesta ha tenido lugar este martes, en la propia piscina, hasta donde se han acercado la alcaldesa, María Isabel Déniz, el concejal de Deporte, Luis Morales, y la concejal de Urbanismo, Nuria Cabrera. Al mismo tiempo que han visitado las instalaciones, el jefe de obra, Miguel Ángel Casanova, y el arquitecto y director de obra, José Rafael Ramírez, han afirmado que esta preocupación por las obras es "completamente infundada". "Dicen que incumple la seguridad, y yo puedo asegurar, e incluso demostrar, que esta cubierta, esta estructura, cumple todos los requisitos de seguridad y está siendo construida por una empresa de gran cualificación a nivel nacional e incluso internacional", ha asegurado Miguel Ángel Casanova.
La estructura de la cubierta es de madera laminada, y se recubrirá de un material llamado LANIK, compuesto por tres capas que dejarán pasar la luz del sol. La primera de ellas será una capa metálica, a la que seguirán dos capas aislantes e impermeabilizadoras. "De esta forma, se conseguirá una cubierta flexible y dilatante que evitará su deformación a causa de los fuertes cambios de temperatura", ha explicado José Rafael Ramírez.
"Con esta obra estamos por encima de la media canaria en cuanto a equipamiento deportivo", ha afirmado María Isabel Déniz. La nueva piscina, que está previsto que se termine en diciembre, contará con dos zonas diferenciadas. La primera de ellas, la zona de baño, albergará la piscina principal, de 25 metros de largo y 12,5 de ancho, y una zona de spa y balnearios. La planta alta, tendrá tres gimnasios y una biblioteca. Por último, está previsto la ubicación de un rocódromo de doce metros y medio.