La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas ha emitido un auto en el que se ordena juzgar al empresario Jaime Cortezo, dueño del Islote del Francés, por un supuesto delito de estafa en la venta de unas viviendas en Telde. De esta manera, la Audiencia revoca el sobreseimiento de la causa que se seguía contra Cortezo en el Juzgado de Instrucción Número 5 de Las Palmas y admite los recursos que se presentaron en noviembre de 2009.
Según el auto de la Audiencia Provincial, el promotor se tendrá que sentar en el banquillo de los acusados en el curso de un juicio oral para responder por la venta de una docena de dúplex en la urbanización Hoya Pozuelo, en Telde. Estas casas fueron vendidas cuando ya había una sentencia firme que ordenaba su demolición por incumplir la Ley de Costas.
"De lo actuado se deducen claros indicios racionales de criminalidad imputables a los querellados", destaca el auto del magistrado, que indica que Jaime Cortezo procedió a vender la mayoría de las viviendas "que se encontraban afectadas por un expediente sancionador de Medio Ambiente y Urbanismo, así como por una orden de demolición".
Según el auto,la situación ilegal de estos dúplex fue "ocultada por el vendedor a los compradores". Así, al manifestar Cortezo que las viviendas estaban libres de cargas y gravámenes "se faltaba a la verdad deliberadamente". "El engaño debe entenderse como ardid u ocultación maliciosa de la verdad que, de conocerse, no habría llevado al sujeto pasivo a realizar un acto de disposición patrimonial", refleja el auto, dejando claro que el magistrado considera que si el comprador hubiera sabido de la situación de los dúplex "no habría adquirido una vivienda por más de 30 millones de las antiguas pesetas si sabe que sobre ella pesa una orden de demolición".
"Ocultada deliberadamente por el querellado"
El juez asegura que, pese a que la situación de estos dúplex de Telde fue publicada por muchos medios de comunicación, fue "deliberadamente ocultada y silenciada por el querellado" a los compradores. "De otro modo no se explica cómo personas que necesitan de un préstamo hipotecario casi de por vida, insistan en comprar unas viviendas que van a demoler con toda seguridad", indica el auto.
En este sentido, la Audiencia Provincial cree que "la maniobra" del promotor Jaime Cortezo "consistió precisamente en silenciar esa circunstancia o en advertir a los compradores que esa circunstancia estaba solucionada, lo que implica un doble engaño".
Por todo ello, la Audiencia Provincial deja sin efecto el sobreseimiento provisional de la causa y ordena la apertura de juicio oral para juzgar por un presunto delito de estafa a Jaime Cortezo, vinculado a Lanzarote como propietario de una importante bolsa de suelo en Arrecife, el Islote del Francés, donde pretende que se aplique un cambio en el planeamiento municipal para poder construir.
