La alcaldesa de Yaiza, Gladys Acuña, se ha acogido este jueves a su derecho a no declarar, negándose así a responder a las preguntas de la juez, el fiscal y la acusación particular en el caso Stratvs. Acuña ya había prestado declaración como imputada en esta causa en julio de 2013, pero la juez Silvia Muñoz volvió a citarle este jueves para que respondiera por un nuevo delito.
En un auto fechado el pasado 9 de marzo, la juez imputó a Acuña otro delito de prevaricación urbanística "en su modalidad omisiva", al no haber adoptado medidas contra la bodega Stratvs pese a que, al menos a raíz de su primera declaración en los Juzgados por esta causa, conocía la "carecía de títulos habilitantes en relación a su construcción y funcionamiento".
Gladys Acuña estaba citada a las 10 de la mañana de este jueves y poco antes de esa hora ha llegado a los Juzgados de Arrecife. Sin embargo, no ha querido prestar declaración ni responder a las preguntas sobre este nuevo delito que se le imputa.
La juez le preguntó en 2013 si iba a adoptar medidas
Acuña ya estaba imputada en la causa por un delito de prevaricación urbanística, al haber autorizado en su día la apertura de la bodega. En su primera declaración, en julio de 2013, la alcaldesa alegó que otorgó la autorización porque contaba con informes positivos y desconocía las numerosas irregularidades que ha puesto de relieve esta causa.
En ese momento, la juez le llegó a preguntar si iba a adoptar medidas ahora que tenía conocimiento de la situación urbanística de Stratvs. Sin embargo, aunque la alcaldesa respondió que sí, la bodega continuó abierta. De hecho, 20 días después de esa declaración, el Juzgado tuvo que dirigirse al Ayuntamiento para que manifestara qué medidas se habían adoptado.
Finalmente, en septiembre de 2013 el Ayuntamiento de Yaiza ordenó un precinto, pero sólo sobre el restaurante. Sobre el resto del complejo, que en realidad estaba en la misma situación, mantuvo abierto el expediente, pero nunca lo concluyó. Fue el propio Juzgado quien, en diciembre de 2013, tuvo que ordenar el cierre total de la bodega. En aquel auto, la juez Silvia Muñoz reprochaba la "aún actual y flagrante inactividad del Ayuntamiento y su patente dejadez en el cumplimiento de sus funciones".