Durante las conversaciones que mantuvo Fernando Becerra con uno de los denunciantes de la Operación "Unión", Carlos Espino, para proponerle un soborno a cambio de regularizar la parcela de Costa Roja y los hoteles ilegales de Playa Blanca, el empresario explica cómo se llevaría a cabo el pago de la comisión.
Becerra afirma que Luis Lleó le entregaría a él un pagaré de 100 millones de pesetas. "Yo lo retengo, y una vez que tú resuelvas, dentro de un mes lo vamos a hacer efectivo. Dentro de un mes, que es lo que vas a tardar tú, más o menos, en sacar esto palante".
Además, insiste en pedirle a Espino "plena confianza". "Si yo tengo eso, eso va a misa", le dice Becerra, agregando que si por cualquier motivo el consejero tuviera que "parar" el tema y no cumplir su parte, él le devolvería el pagare a Lleó.
"Yo lo que hago también es la función de hombre bueno, por decirlo de alguna manera. Que lo soy además, y serio. Entonces tú tienes total y absoluta garantía conmigo, de que yo, ni tú, ni Lleó, te vamos a meter un machetazo", insiste Fernando Becerra. "Vamos a hacer las cosas bien porque esto tiene que ser así. Hay que ser honesto, ¡coño! En el tema del negocio yo soy impepinable".
