El Hierro ha vivido su peor fin de semana desde que se iniciara la crisis sismo volcánica. La isla registró este sábado el movimiento sísmico más intenso, con una magnitud de 4,3 grados. Además, durante el viernes se produjeron hasta 16 sismos sentidos por la población, 8 de los cuales se registraron en tan sólo una hora y despertaron "cierta alerta" en la población, según informan desde el Gobierno de Canarias.
El sismo de mayor intensidad registrado hasta ahora, el de 4,3 grados, tuvo lugar a un kilómetro de la costa de El Pinar, sobre las 21:37 horas del sábado. No se produjeron daños personales, pero se registraron desprendimientos en la carretera de Tacorón a La Restinga, que quedó parcialmente obstaculizada, y en las laderas exteriores del túnel de Los Roquillos. El Cecoes 1-1-2 recibió hasta 13 llamadas de los tres municipios herreños.
El viernes se dejaron sentir en El Hierro hasta 16 sismos, ocho de los cuales eran de igual o mayor magnitud a 3 grados en la escala Richter. Además, ocho de los sismos se registraron en tan sólo una hora.
El Instituto Geográfico Nacional ha localizado en la última semana, del 1 al 7 de octubre, 890 sismos, la mayoría de ellos situados en el mar, al sudoeste de la isla.
Desde el pasado 17 de julio, el Instituto Geográfico Nacional ha registrado y localizado 9.819 sismos, a profundidades de entre 10 y 15 kilómetros. El sismo de mayor magnitud, hasta el sentido este sábado, era de 3.8 en la escala de Richter. Este fenómeno sísmico ha provocado deformaciones superficiales, que hasta el momento han superado los 35mm.
Recomendaciones
Desde el Gobierno de Canarias han vuelto a enviar "un mensaje de calma a la población" y recuerdan que la isla se encuentra en situación de semáforo amarillo, por lo que la sucesión de sismos sentidos "entra dentro de la normalidad y no existe inminencia de una erupción volcánica".
Asimismo, desde el Gobierno de Canarias insisten en que la población esté atenta a los comunicados oficiales y tome medidas de autoprotección. Entre ellas, recomiendan que si el ciudadano se encuentra en el interior de un edificio, no salga del mismo hasta que finalice el movimiento, que busque refugio debajo de estructuras fuertes y se mantenga alejado de ventanas, cristaleras, vitrinas, tabiques y objetos que puedan caerse y llegar a golpearle, además de alejarse de la cocina, no utilizar el ascensor y apagar el suministro de luz, agua y gas. En un edificio público, señalan que "no es conveniente correr despavorido hacia la salida".
Si la sacudida sorprende en el exterior, explican desde el Gobierno de Canarias, es conveniente guardar la calma y hacer que los demás la guarden. Además, recomiendan ir hacia un área abierta, alejándose de los edificios dañados. Si se está circulando en coche, se debe detener lentamente el vehículo, procurando no bloquear la carretera. También se pide estar atento a la radio para conocer de mano de las autoridades la situación y las recomendaciones, en especial, por posibles bloqueos de carretera.