Ante [la denuncia realizada por el Partido Socialista en Arrecife->45063] sobre el nuevo retraso en la finalización de las obras de conducción y saneamiento de aguas pluviales de la capital, que se llevan a cabo desde hace algo más de un año por la empresa Bruesa, el grupo de gobieno del Ayuntamiento de Arrecife ha exigido a los socialistas que "reclamen a sus compañeros en Madrid la solución a estos importantes trabajos para la ciudad", ya que la obra está financiada por el Ejecutivo Central, gobernado por el PSOE.
El grupo de gobierno capitalino no entiende la "falta de preocupación" demostrada por los representantes del PSOE de Lanzarote en Madrid, y afirma que el diputado nacional, Miguel González, y el senador Marcos Hernández, "ni siquiera se han interesado por el estado de estas obras, ni han exigido a sus compañeros de Madrid una solución a las mismas".
En este sentido, el alcalde de Arrecife, Cándido Reguera, ha reclamado a los socialistas que "trabajen en buscar soluciones a unas obras que están perjudicando enormemente a la ciudad, en lugar de echar balones fuera". Reguera insistió en que esta obra es competencia del Gobierno central y que es éste quien tiene que darle solución. Asimismo, adelantó que se volverá a dirigir nuevamente al Ejecutivo central para exigirle una respuesta inmediata que agilice los trabajos y puedan estar culminados antes de que comiencen las lluvias".
El Ayuntamiento de Arrecife sostiene que ha mantenido diversas reuniones no sólo con los responsables de Bruesa, la empresa adjudicataria de estas obras, sino también con la dirección de las mismas, debido a la ralentización en la ejecución de estos trabajos y la multitud de problemas ocasionados, fundamentalmente en el tráfico. Asimismo, desde el grupo de gobierno también señalan que los técnicos del Consistorio "revisarán metro por metro los trabajos que en estos momentos realiza Bruesa, y si éstos no están bien, la obra no será recepcionada"
"No podemos permitir que Arrecife siga `patas arriba´ por unas obras que se han hecho mal desde un primer momento", concluye Cándido Reguera.
