La Junta de Gobierno y la Junta General del Consejo Insular de Aguas han aprobado este lunes un plan de inversiones que asciende a 1.563.285 euros, con cargo a los presupuestos de 2012 y a los remanentes de Tesorería. En concreto, gran parte de este dinero, alrededor de 900.000 euros, se destinarán a la mejora de las redes de Inalsa. Este presupuesto será dividido en tres lotes de 298.000 euros cada uno, según han señalado desde el Cabildo a través de un comunicado.
Además, se destinarán otros 489.000 euros para ejecutar un colector en San Bartolomé, se invertirá algo más de 16.000 euros en una red intermedia de saneamiento en Playa Blanca y se realizarán obras complementarias de red de riego en la Avenida El Marinero, de La Santa, por valor de 27.000 euros. Asimismo, se destinarán 56.000 euros a las obras de red de riego en Tisalaya, así como mejoras en la red de saneamiento en las Avenida Las Palmeras, de Costa Teguise. No obstante, el Cabildo ha advertido de que algunas de estas partidas están "a expensas de la disponibilidad de los remanentes".
El "95 por ciento" de este plan de inversiones estará destinado, según el presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, a "obras hidráulicas relacionadas con la encomienda del saneamiento, producción y distribución que tiene la empresa pública Inalsa". "Respondemos al acuerdo alcanzado en pasados ejercicios tanto por la Junta de Gobierno como por la Asamblea del Consejo Insular de Agua en el sentido de priorizar este tipo de inversiones ante la situación de emergencia hídrica que sufre la isla", ha indicado San Ginés.
A estos 1,5 millones de euros, hay que sumar los otros 1,5 millones que se destinaron ala sustitución de la tubería Uga-Las Breñas en 2010, así como los 1,2 millones de euros que se invirtieron en reparaciones de redes durante 2011. "Estas necesarias inversiones se verán complementadas a lo largo de este año con los 2 millones de euros que tienen previsto destinar de recursos propios el Cabildo y los ayuntamientos, miembros del Consorcio del Agua de Lanzarote", según ha insistido San Ginés.
