A pesar de conocer la situación, el grupo de Gobierno no informó de ello en el pleno celebrado el 28 del mismo mes

El Cabildo sabía desde el 11 de noviembre que 120.000 litros de vino no eran aptos para embotellar

Los consejeros de APL se constituyen en grupo político de los No Adscritos; Marcos Páez abandona la disciplina del PIL, mientras que los insularistas nombran a Plácida Guerra como portavoz y exigen la dimisión de Inés Rojas como presidenta

12 de enero de 2006 (22:49 CET)
El Cabildo sabía desde el 11 de noviembre que 120.000 litros de vino no eran aptos para embotellar
El Cabildo sabía desde el 11 de noviembre que 120.000 litros de vino no eran aptos para embotellar

El Cabildo de Lanzarote ha celebrado un pleno ordinario este jueves, una sesión bastante aburrida y sin apenas resoluciones importantes, hasta que una moción de Alternativa Ciudadana 25 de Mayo, seguida de otra del Grupo Popular, sacó a la palestra el que se convirtió en el tema estrella del día y levantó los ánimos tanto de los consejeros como del público que estaba en la sala.

Sólo una moción trajo Pedro Hernández por la vía ordinaria, pero ni siquiera pudo exponerla, porque tras un rife rafe con la presidenta cabildícia, Inés Rojas de León, el grupo de Gobierno obligó a la formación progresista a plantear el contenido de la misma en el apartado de ruegos y preguntas, ya que el texto de la moción contenía nada menos que 23 preguntas y ninguna propuesta.

Pero acto seguido planteó una moción en el mismo sentido el Partido Popular, al proponer la creación de una comisión de investigación para depurar las responsabilidades de que el vino se haya estropeado y sea necesario convertirlo en vinagre.

Reconocimiento

Lo más polémico del debate de esta moción, que duró cerca de una hora, fue el reconocimiento por parte del grupo de Gobierno del hecho de que sabían desde el 11 de noviembre que 120.000 litros de vino superaban el nivel de acidez volátil indicado para embotellarlo, pero no informaron de ello en el pleno celebrado el 28 del mismo mes.

En aquella sesión se llevó la aprobación del pago de la uva a los agricultores. Sin embargo, no se informó hasta el 23 de diciembre sobre el hecho de que el vino se había estropeado.

El Partido Popular señaló al respecto a través de un comunicado de prensa transmitido a la redacción de este diario que "con todo ello", al haber también rechazado la creación de una comisión de investigación, "en lugar de asumir responsabilidades y disponer todos los mecanismos posibles para esclarecer las múltiples dudas que existen sobre el proceso, la Presidenta de la Institución opta por la huida hacia adelante".

Por su parte, Inés Rojas explicó de forma pormenorizada, aunque no así para la oposición, las causas de que 120.000 litros de vino se vayan a convertir ahora en vinagre, insistiendo en que éste puede resultar tanto o más rentable que los mejores caldos de la Isla. Incluso planteó la presidenta la posibilidad de crear y consolidar una denominación de origen para el vinagre.

Según la dirigente de la Institución, "gracias a la intervención del Cabildo, y con la aprobación del Consejo Regulador, las bodegas de la Isla compraron cerca del doble de fruta de lo que en un principio tenían previsto, esto es, más de 560.000 kilos de uva, por lo que era necesario transformarla en vino para una mejor conservación".

Bajo la supervisión de técnicos del Cabildo, que asistieron a todo el proceso de precintado y análisis, inicialmente se almacenó el producto en las instalaciones de las bodegas El Grifo, La Geria y Bermejo, las únicas que en aquel momento tenían espacio en sus tanques. Sin embargo, debido a problemas de almacenamiento, se recurrió posteriormente a transportar parte del vino a bodegas que no habían comprado uva, como es el caso de Tinache (en torno a 50.000 litros), y a las propias dependencias del Complejo, que fueron acondicionadas y adecentadas para alojar unos 120.000 litros.

Precisamente en ese momento se apreció que 80.000 litros del vino almacenado en el Complejo y 50.000 del recogido por El Grifo presentaban un aumento en el nivel de acidez volátil, por lo que se recomendó no mover más el producto y se planteó la posibilidad," que podría ser muy positiva, de aprovechar esos caldos para producir, por primera vez, un vinagre de malvasía balsámico que podría optar a la denominación de origen", señaló la presidenta.

Cambios en el panorama político

Muchos fueron los escritos y cambios oficializados que se presentaron en este pleno, aunque ninguno representa una novedad para los navegantes, porque todo se sabía. Los consejeros de Asamblea por Lanzarote se constituyeron en el grupo de los No Adscritos, lo que fue muy criticado por AC-25M y el Partido de Independientes de Lanzarote (PIL), por ostentar este grupo la presidencia sin contar, al menos a efectos oficiales, con un partido político respaldado por la ciudadanía.

El PIL aprovechó para presentar al Pleno el escrito de expulsión de los consejeros a los que denominan "tránsfugas", mientras que Marcos Páez, en solidaridad con sus compañeros de filas en el Gobierno, comunicó su abandono del PIL. Por último, los insularistas nombraron a Plácida Guerra como portavoz de su grupo político y leyeron un escrito en el apartado de ruegos y preguntas solicitando la dimisión de Inés Rojas como presidenta del Cabildo.

Crítica a las resoluciones de Presidencia

Como uno de los puntos del día el Gobierno trajo a Pleno una serie de resoluciones de la Presidencia para ser debatidas en la sesión. Tras felicitar a Rojas por una práctica de "transparencia", al parecer "inhabitual", el consejero de AC, Pedro Hernández, criticó severamente una subvención de nueve mil euros a la sociedad Marina Rubicón para la organización de un concurso de pesca, promovido por el Patronato de Turismo.

"Quién se cree usted para dar dinero público a los más ricos del mundo", increpó Hernández a la presidenta.

Otra subvención comentada por el consejero en este punto fue la que se destina al Rally Barcelona Dakar, celebrado el año pasado. El Cabildo desembolsará 12.000 euros en concepto del patrocinio de la Isla en aquella edición.

El consejero de Alternativa calificó la carrera como "un desfile de portadores de la civilización en medio del continente africano", insinuando que la Institución no debería patrocinar un evento organizado por los países ricos en el territorio de los más desfavorecidos.

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