La presidenta del Cabildo, Manuela Armas, convocará en la primera semana del mes de marzo una sesión extraordinaria del Pleno de la Corporación destinada a debatir el estado de la isla.
Esta convocatoria aparece recogida en el artículo 107 del Reglamento Orgánico del Cabildo de Lanzarote, en la sección quinta, dedicado a los instrumentos de Información, Control y Fiscalización.
La incorporación de este debate al reglamento se realizó en el año 2007, cuando la normativa de funcionamiento de la Administración insular fue adaptada a las exigencias de la Ley de Modernización del Gobierno Local, más conocida como Ley de Grandes Ciudades.
En cualquier caso, este mecanismo de transparencia y comunicación exterior de la gestión no es condición exigible para la adaptación a la mencionada Ley. De hecho, el Cabildo de Lanzarote es el único del archipiélago canario que ha introducido este artículo en su reglamento.
Según el documento, el presidente del Cabildo deberá convocar al menos una vez por año un debate de estas características, sobre la situación general de la isla y las líneas maestras de la acción de gobierno.
El desarrollo de esta sesión, tal y como recoge el Reglamento, arrancará con la intervención de Manuela Armas, tras lo cual se suspenderá el acto durante un plazo mínimo de tres horas.
Reanudado el Pleno, intervendrán los portavoces de los grupos, de mayor a menor, excepto aquellos que integren el equipo de Gobierno, que lo harán al final. La duración máxima en cada caso será de media hora. La presidenta podrá contestar a los intervinientes de forma individual o conjunta, tras lo cual se concederán sendos turnos de réplica y dúplica, por un tiempo máximo de 10 minutos.
Finalizado el debate, Armas deberá suspender la sesión hasta el día siguiente y se abrirá un plazo para que los Grupos políticos puedan presentar en Secretaría, hasta dos horas antes de la reanudación del Pleno, sus propuestas de resolución. Estas deberán ser congruentes con la materia objeto de debate y referirse a cuestiones de política general suscitadas durante el mismo.
Una vez admitidas a trámite aquellas propuestas que reúnan los requisitos, se reanudará la sesión. Los portavoces podrán entonces defender sus planteamientos de forma conjunta durante 20 minutos; a continuación, la presidenta podrá conceder un turno en contra por el mismo tiempo. La votación será por orden de presentación.