Opinión

A tiempo de rectificar (carta abierta al presidente del Gobierno de Canarias)

Sr. Presidente, 

En Canarias, en junio de 2014, conviene tener muy presente que el Partido Popular lleva ganando consecutivamente todos los comicios electorales desde el año 2008: generales 2008, europeas 2009, autonómicas 2011, generales 2011 y europeas 2014. 

Los dos partidos políticos que sustentan su gobierno y su presidencia, Coalición Canaria y el Partido Socialista Canario, segunda y tercera fuerza política en las últimas autonómicas de 2011, apoyaban ambos las prospecciones petrolíferas antes de esas elecciones, demostrándose ello con la revisión de diferentes declaraciones públicas existentes en hemerotecas o con la mera revisión de programa electoral. 

Es más, ocho meses después de las elecciones de 2011, en el encuentro que mantuvo con el Ministro de Industria en su primera visita institucional a Canarias, usted acogió favorablemente la posibilidad de las prospecciones petrolíferas condicionando el definitivo apoyo del Gobierno de Canarias a que se reconociese, por parte del Gobierno de España, las futuras oportunas ventajas económicas para el archipiélago, con lo que el Ministro estuvo absolutamente de acuerdo. 

Meses después de aquel encuentro, Coalición Canaria, el Partido Socialista Canario y el propio Gobierno de Canarias cambiaron antagónicamente de posición enarbolando la bandera de salvadores exclusivos de Canarias. 

El argumento que esgrimieron para justificar el inesperado, radical y beligerante cambio de posición fue el elevadísimo riesgo de catástrofe ambiental que súbitamente apreciaron para Lanzarote, para Fuerteventura y para todo el archipiélago canario. De repente se anunciaron playas anegadas de petróleo y plataformas de extracción de crudo humeantes a escasos metros de las costas. Se publicitaron internacionalmente dramáticas imágenes que alertaban al turismo y se intentó crear, con fondos públicos, un estado de opinión adverso a las prospecciones, calificándolas como el mayor atentado del Estado español. 

Recientemente ha habido dos hitos que han desmontado tanto la falaz argumentación del riesgo ambiental, y de sus dramáticas consecuencias, como el mito del masivo rechazo ciudadano a las prospecciones. 

El primero es el escasísimo apoyo a las manifestaciones contra las prospecciones petrolíferas que, en toda Canarias, ha sido del 2,23% de todos los canarios. Esa cifra demuestra que el discurso del miedo al riesgo apocalíptico ha fracasado estrepitosamente. Vender como clamor de los canarios los paupérrimos resultados de las manifestaciones contra las prospecciones es una mera huida hacia adelante. 

El segundo hito que ha desmontado su estrategia es la Declaración de Impacto Ambiental elaborada por el Ministerio de Medio Ambiente (CEDEX), o sea por funcionarios de carrera completamente ajenos a la política, publicada recientemente en el BOE: El riesgo de vertido es cercano a cero y, además, de la infinitesimal probabilidad de vertido, sólo el 5,8% llegaría a las costas de Canarias. Sin embargo, el riesgo que asume diariamente el archipiélago por el tráfico de las millones de toneladas de petróleo y derivados que anualmente necesitamos los canarios para vivir es millones de veces superior al riesgo en el que ustedes han basado su campaña en contra de las prospecciones en aguas españolas a decenas de kilómetros de las costas de Canarias. Sólo en Lanzarote, cada año entran 500.000 toneladas por el puerto de Los Mármoles, y ni usted, ni su gobierno, ni Coalición Canaria ni su socio en el poder han protestado nunca por tal realidad. 

Además, no podemos obviar que los canarios ya estamos soportando el riesgo de las prospecciones que Marruecos está efectuando en la misma zona. 

Por tanto, le animo a que abandone la estrategia del miedo pues se ha demostrado falsa. Abandone asimismo el argumento del rechazo ciudadano masivo, pues también se ha demostrado falso. 

Sr. Presidente, está usted a tiempo de rectificar por y para Canarias.