Canarias

Lanzarote quedará por ahora al margen del certificado Covid obligatorio

El Gobierno ya ha definido cómo pretende aplicar esta norma, que debe recibir aval judicial. Afectará a restaurantes, discotecas y cualquier evento cultural o deportivo, pero solo en islas en nivel 3 o 4

El viceconsejero de la Presidencia, Antonio Olivera, durante la rueda de prensa posterior al Consejo

El Gobierno de Canarias ya ha definido las normas que regirán el uso del certificado Covid obligatorio que pretende imponer en eventos y espacios de uso público, y que ahora deben recibir aval judicial. No obstante, Lanzarote quedará al margen,  al menos por el momento, decida lo que decida el Tribunal Superior de Justicia de Canarias. Y es que el Ejecutivo regional ha anunciado que la intención es hacerlo obligatorio solo en las islas que se encuentren en nivel 3 o 4 de alerta sanitaria, lo que actualmente afecta a Tenerife, Gran Canaria y Fuerteventura.

Durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno extraordinario celebrado este lunes, el viceconsejero de la Presidencia, Antonio Olivera, ha explicado que este martes remitirán al TSJC la propuesta, elaborada por la Consejería de Sanidad tras el acuerdo adoptado la pasada semana.

La intención es que en islas en riesgo alto o muy alto, el certificado se exija en los lugares de uso público a todos los mayores de 12 años y 3 meses, para “garantizar que ya  han tenido acceso a la pauta completa de vacunación”.

En cuanto a los ámbitos a los que afectaría, se han definido un total de 10, aunque habrá excepciones. El primero es el de hostelería y restauración, donde se tendría que exigir el certificado -si lo avala el TSJC- siempre que el bar o restaurante tenga establecido un aforo de más de 30 personas. En caso contrario, estarían exentos.

La misma norma regirá en locales de ocio nocturno, si tienen autorizado un aforo superior a 30 personas. No obstante, si el establecimiento permite el consumo de comida, en este caso sí se debería exigir el certificado Covid, independientemente del aforo que tenga el local en su licencia de apertura.

También se pretende solicitar el certificado Covid, en los mismos términos que en el ocio nocturno, en los establecimientos y espacios dedicados a actividades recreativas y de azar.

 

Certificado en cines, conciertos y gimnasios

La norma, de aprobarse, también implicará exigir ese certificado en eventos y celebraciones, como conciertos y festivales de música, con asistencia de más de 500 personas (y en todos los casos, sea cual sea el aforo, si se permite el consumo de comida).

También regiría en eventos deportivos con asistencia de más de 500 personas, o en cualquiera en el que se permita comer y beber, al igual que en espectáculos públicos.

En las actividades culturales, como cines, auditorios o teatros, pretenden hacer obligatorio el certificado Covid en todos los que tengan un aforo superior a 50 personas, o en cualquier si se permite comer o beber.

La norma también se aplicaría en gimnasios y equipamientos similares, en este caso sin excepciones.

 

Limitación de acceso en centros sanitarios y sociosanitarios

Del mismo modo, también se pretende prohibir el acceso de acompañantes a establecimientos y centros sanitarios si no presentan el certificado Covid. Así, se exigiría a las personas que visiten a pacientes ingresados o a las que pretendan acompañar a un usuario a una consulta o una prueba. En este caso, la excepción se aplicará cuando haya “circunstancias especiales”, como el acompañamiento a un menor o a una persona con discapacidad.

Por último, también se pretende exigir el certificado Covid a las personas que quieran visitar centros sociosanitarios, como residencias de mayores o centros de día.

El certificado Covid implica acreditar la pauta completa de la vacunación, haber pasado la enfermedad hace menos de medio año o tener un resultado negativo de una prueba realizada como máximo 48 horas antes, sin que puedan utilizarse los test de autodiagnóstico que venden en farmacias.

Una vez que la propuesta se envíe al TSJC, éste tiene tres días para pronunciarse. A partir de ahí, en caso de que se aprobara, se publicaría en el Boletín Oficial de Canarias y desde ese mismo momento entraría en vigor, según ha explicado Antonio Olivera.

 

"Evolución preocupante" y "decisiones a corto plazo"

“El incremento de casos en Canarias preocupa de forma muy relevante al Gobierno. Vamos a hacer un seguimiento permanente de la pandemia, estando preparados para tomar decisiones”, ha señalado el viceconsejero, apuntando que también están a la espera de lo que pueda decidirse el próximo miércoles, cuando el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha convocado a una reunión a los presidentes de todas las comunidades.

De momento, tal como ya habían adelantado, lo que ha aprobado el Gobierno canario este lunes ha sido rebajar las restricciones durante la Nochebuena y el día de Navidad en las islas que están en nivel de alerta 2 y 3. Pese a las normas que rigen en esos niveles, esos dos días se permitirán reuniones de hasta 10 personas siempre que sea “en el ámbito familiar”, es decir, no en restaurantes.

Inicialmente se había anunciado que esa excepción se aprobaría también para Nochevieja y Año Nuevo, pero finalmente el Gobierno canario ha decidido pronunciarse por ahora solo sobre las fechas más inmediatas. “La evolución de la pandemia está tomando un cariz muy preocupante en los últimos días y hay que tomar decisiones muy a corto plazo”, ha señalado el viceconsejero respeto al resto de fechas clave de las Navidades.

Además, ha vuelto a insistir en la necesidad de actuar “con responsabilidad” en esos encuentros, “independientemente del número de personas que se reúna”, manteniendo las medidas de seguridad.