El consejero interino de Educación del Gobierno de Canarias, José Antonio Valbuena, ha anunciado este miércoles que esta semana se cerrará el plan de descalada educativa para que los centros de las islas puedan reabrir en las condiciones que marca la Fase 2, que comenzó el pasado lunes.
En una comisión parlamentaria en la que ha reconocido que ha tenido "15 minutos" para prepararla debido su nombramiento 'exprés' tras la dimisión el lunes de María José Guerra, ha indicado que el documento está ultimado a falta de "pulir" algunos aspectos.
Ha dicho que habrá "instrucciones claras" para los centros de cara a la reapertura de partir del próximo lunes, subrayando que desde el Gobierno se ponen "en el lugar de todos" los agentes implicados para la vuelta a las aulas. Precisamente la falta de un protocolo definido ha venido siendo el mayor motivo de queja de docentes y representantes sindicales, que habían pedido la dimisión de su antecesora en el cargo.
En ese sentido, ha indicado que habrá grupos de apoyo para resolver las "dudas" que puedan tener los centros directivos.
Sobre el próximo curso, ha reconocido que será "complejo" porque Canarias tiene más de 1.000 centros educativos que movilizan a más del 10% de la población de las islas "y no es sencillo", porque "no basta con poner un cartel de separación de dos metros", como hacen los centros comerciales. "La magnitud del problema es importante", ha comentado.
En cuanto a las escuelas infantiles de cero a tres años, que también podían abrir en la Fase 2 de la desescalada, ha apuntado que hay un protocolo de actuación diseñado por el área de Salud Pública, pero ha añadido que se harán algunas "correcciones" dadas las características especiales de los usuarios.
"Queremos que se pongan en marcha lo antes posible en las próximas semanas", ha destacado.