La sección primera de la Audiencia Provincial de Las Palmas ha confirmado una sentencia del Juzgado de lo Penal Número 3 de Arrecife por la que se condena a dos años y ocho meses de prisión a un delincuente reincidente, que cometió un delito de robo con fuerza en las cosas en un bar de Yé. El condenado presentó un recurso de apelación a la sentencia de primera instancia, que ha sido desestimado por la Audiencia, que ha confirmado íntegramente este fallo.
Los hechos ocurrieron entre las 18.30 horas del 19 de julio y las 8.20 horas del 20 de julio de 2011. Este hombre, "guiado por un ánimo de ilícito beneficio", según la sentencia, accedió a un bar de Yé, en el municipio de Haría, tras "fracturar con una piedra el cristal de acceso a la terraza". Se introdujo dentro del bar y se hizo "con todo de cuanto valor encontró".
Según se recoge en la sentencia, sustrajo varias botellas de bebidas alcohólicas, helados y otros objetos de decoración del establecimiento. También se llevó 50 euros de la caja registradora. Los objetos fueron tasados en 215 euros. Pero, además, este hombre "guiado por el mismo ánimo" forzó una máquina de frutos secos y fracturó una máquina de tabaco, causando daños tasados pericialmente en 1.175,24 euros.
Reincidente
Por estos hechos se le condenó a dos años y ocho meses de cárcel, ya que en este caso concurría "la agravante de reincidencia". Anteriormente, había sido condenado por otros hechos. En concreto, la primera condena la dictó el Juzgado de lo Penal Número 1 de Arrecife, que le impuso una pena de un mes y 15 días de multa por un delito de hurto de uso.
Además, el Juzgado de lo Penal Número 3 de Arrecife le condenó en enero de 2010 a un año y tres meses de prisión por una tentativa de robo con fuerza en una vivienda habitada y en julio de 2011 le condenó a otro año de cárcel también por intentar robar en una casa.
La Audiencia Provincial ha confirmado la sentencia que le condena a dos años y ocho meses de prisión, ya que considera ha quedado acreditado que el apelante "es autor material" de este robo, en base a la "valoración conjunta del material probatorio", del que destaca especialmente las dos huellas dactilares que fueron halladas en un cristal que se encontró en un muro adyacente.
