Greenpeace ha decidido finalmente pagar la fianza para liberar el barco Arctic Sunrise, que permanecía retenido en el puerto de Arrecife por orden del Ministerio de Fomento. Aunque más de 60.000 personas habían pedido la liberación del barco, según explica la asociación, Fomento se había negado a retirar o rebajar la fianza impuesta, por lo que finalmente han decidido abonarla.
"Greenpeace ha vuelto a decir alto y claro que no nos callarán. Ni con fianzas desproporcionadas, ni con embestidas de lanchas, ni con amenazas de cárcel", ha declarado Mario Rodríguez, director de Greenpeace, que advierte de que "cada día que el Arctic Sunrise está detenido, es un día menos que no está defendiendo el medio ambiente". Por eso, explica que han "reunido el dinero para liberarlo, gracias al apoyo de socios y simpatizantes".
Ahora, tras recurrir el expediente administrativo y depositar la fianza, los abogados de Greenpeace emprenderán acciones legales por la "desproporcionada acción de la Armada el pasado sábado 15 de noviembre, que se saldó con varios heridos, una de las cuales tuvo que ser hospitalizada".
Una gran pancarta en Madrid
Coincidiendo con este anuncio, Greenpeace ha desplegado una pancarta de 126 metros cuadrados en Madrid con el lema "Defender el medio ambiente, nuestro derecho y deber". La organización está llevando a cabo esta acción de denuncia "tras la fuerte represión del Gobierno a la acción pacífica contra las prospecciones de Repsol, el pasado sábado 15 de noviembre".
La asociación recuerda que "la Armada abordó violentamente las lanchas de la organización y resultaron heridos tres activistas, tras lo cual el Ministerio de Fomento ordenó la detención del barco Arctic Sunrise en Canarias".
Ahora, tras reunir el dinero de la fianza "gracias al apoyo de socios y simpatizantes", el barco de Greenpeace pondrá rumbo a Valencia para apoyar a las 17 personas que se enfrentan a posibles penas de dos años y ocho meses de cárcel por otra "protesta pacífica". Un total de 16 activistas y un fotoperiodista independiente serán juzgados en Valencia a partir del 4 de diciembre por una acción en la que se pintó "peligro nuclear" sobre una torre de refrigeración de la central de Cofrentes (Valencia), propiedad de Iberdrola, en febrero de 2011.
Así, Greenpeace ha decidido desconvocar las concentraciones ante las delegaciones de Gobierno de las capitales de provincia para la tarde de este martes, pues estaban previstas para pedir la liberación del barco Arctic Sunrise, "algo innecesario ante el nuevo escenario". Sin embargo, sí mantiene las concentraciones a las 18 horas ante las delegaciones canarias, para mostrar una vez más su más absoluto rechazo a las prospecciones.
