CIENTOS DE PERSONAS NO QUISIERON PERDERSE EL ESPECTÁCULO

El Charco de San Ginés se enciende con el concierto en vela de la Orquesta Clásica de Lanzarote

Cientos de personas se dieron cita en este espacio para disfrutar de este homenaje al hombre del mar...Vea la galería de fotos

20 de julio de 2014 (22:10 CET)
El Charco de San Ginés se enciende con el concierto en vela de la Orquesta Clásica de Lanzarote
El Charco de San Ginés se enciende con el concierto en vela de la Orquesta Clásica de Lanzarote

Fotos: Sergio Betancort

El original y novedoso concierto en Vela, Homenaje al Hombre del Mar, tuvo un rotundo éxito contando con una masiva asistencia de público. Desde primeras horas de la tarde, los más madrugadores se fueron acomodando en las sillas y gradas más próximas al escenario flotante para no perderse ni el más mínimo detalle del novedoso espectáculo.

El espacio natural que ofrece el Charco de San Ginés, iluminado solo con la luz de las velas viendo desde la ribera cómo los barquillos transportaban a los músicos de la Orquesta Clásica de Lanzarote para una vez  colocados en el escenario flotante  encenderse con dos potentes cañones, era sublime, espectacular.

Una vez todo el escenario montado se inició  el concierto con una composición de Vivaldi, finalizada la misma se incorporaba el músico y timplista Benito Cabrera y junto con la OCL interpretó folías, isa, polka de la guagua y su famosa composición "Nube de Hielo". Actuación que era constantemente aplaudida por el público.

Posteriormente subió al escenario el joven músico lanzaroteño Ayoze Rodríguez. Con su clarinete interpretó una composición de Mozart y Piazzolla, momento en el que entró en escena la soprano Sheyla Rizo y juntos interpretaron, El Pastor en la Roca, de Frank Schubert.

Sheyla se quedó sola con la Orquesta y en la recta final se incorporaron Luis Alberto González, Beni Ferrer y Roberto Fuentes y unidos a la voz de Sehyla Rizo con el acompañamiento de la orquesta, Benito Cabrera y Ayoze Rodríguez interpretaron magistralmente el Halleluiah de Leonard Cohen. Mientras sonaba esta canción el escenario flotante fue abordado por jolateros, piragüistas y barquillos y con velas encendidas ofrecieron una estampa impresionante.

El público entusiasmado desde la ribera del charco pedía que continuaran, respuesta que fue concedida ofreciendo un bis con el Halleluiah, finalizada la misma Roberto Fuentes y Beni Ferrer se lanzaron al agua llegando a nado hasta la orilla donde fueron recibidos con aplausos.

 

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