Sucesos

La Guardia Civil denuncia a dos personas por pescar en la Reserva  Marina de La Graciosa

La actuación de un agente que estaba fuera de servicio permitió la actuación conjunta del Seprona y del Servicio de Vigilancia  de la reserva

La Guardia Civil denuncia a dos personas por pescar en la Reserva  Marina de La Graciosa

La Guardia Civil ha denunciado a dos varones vecinos del municipio de Tías por cuatro infracciones administrativas a la Ley de Pesca de Canarias, al capturar 20 kilogramos de diferentes tipos de especies marinas en una zona protegida.

Fue un agente que estaba fuera de servicio en la playa de la Cantería, en el municipio de Haría, quien observó a dos personas con trajes de neopreno que se dirigían al norte de la citada playa, en una zona debajo de los riscos hacia Punta de los Fariones.

Según ha informado la Guardia Civil, el agente se puso entonces en contacto con el Seprona de la isla para comentarle la situación, confirmando que estaba prohibido en dicho lugar la realización de la pesca submarina por encontrarse dentro de la Reserva Marina de la isla de La Graciosa, y que solamente está permitida algunas modalidades de pesca bajo autorización de la Viceconsejería de Pesca del Gobierno autonómico.

 

Seguimiento


El Seprona dio aviso a la patrulla territorial del Puesto Principal de Costa Teguise y a la patrullera del Servicio de Vigilancia de la Reserva Marina de la isla de La Graciosa, que inspeccionó la zona y no encontró a las dos personas en los riscos ni tampoco boyas de señalización que indicaran que estaban realizando pesca submarina.

Sin embargo, el turismo en el que llegaron las dos personas en cuestión seguía estacionado en las cercanías de la Playa de la Cantería, por lo que la patrulla esperó en la costa a que regresaran.

Finalmente en torno a las 18:00 horas la Guardia Civil identificó a los dos hombres, que llevaban todo el material necesario para la práctica de la pesca submarina (neoprenos, fusiles, plomos, aletas, etc.), y 20 kilogramos de diferentes especies marinas, como pulpos y morenas, que fueron entregados posteriormente al complejo mediambiental de Zonzamas.

Los agentes comprobaron además como una de las personas carecía de licencia para la pesca submarina, por lo que fueron denunciados por varias infracciones a la Ley de Pesca, como realizar una actividad prohibida en una zona protegida, ejercicio recreativo de la actividad pesquera sin disponer de la preceptiva autorización,  capturar más de lo permitido por persona en pesca recreativa (que es cinco kilogramos por persona y día), y la falta de señalización reglamentaria en el ejercicio de la actividad pesquera.