Sucesos

La Audiencia Provincial juzga dos delitos por menudeo de droga en Lanzarote

El primero de los juicios sentaba en el banquillo a M.A.E. por un presunto delito contra la salud pública. A testificar han acudido un total de cinco agentes de la Policía Nacional participantes en el dispositivo contra la venta de ...

La Audiencia Provincial juzga dos delitos por menudeo de droga en Lanzarote

El primero de los juicios sentaba en el banquillo a M.A.E. por un presunto delito contra la salud pública. A testificar han acudido un total de cinco agentes de la Policía Nacional participantes en el dispositivo contra la venta de droga que tuvo lugar en la zona de las rapaduras de Arrecife el pasado 6 de marzo de 2006. Y, aunque de los cinco agentes, sólo dos han declarado haber visto "de forma clara y nítida la transacción entre el comprador y el vendedor", el Ministerio Fiscal ha considerado "acreditada la culpabilidad del acusado gracias a la prueba testifical de la Policía" y a que el comprador también le ha reconocido. Por ello, la Fiscal ha pedido una pena de cinco años de prisión contra el acusado.

El dispositivo policial tuvo lugar en los alrededores del bar Bolera, junto a la gasolinera, con agentes vestidos de paisanos. Uno de ellos fue el encargado de incautar la droga, "un boliche de cocaína", al primer comprador. El agente ha declarado que tras observar la transacción y "sin perder de vista al acusado" vio como "minutos después se sacaba algo de la boca y realizaba una segunda transacción".

La defensa por su parte ha solicitado la absolución del imputado por dos contradicciones que ha detectado en la declaración de los testigos durante el juicio. Según el letrado, "el comprador declaró en un primer momento que esperó a que el acusado se bajase de un Opel Corsa para realizar el intercambio mientras que ninguno de los policías ha declarado esto aunque estuvieran en el lugar".

En el segundo de los juicios celebrados este martes, el acusado también se sentaba ante el estrado por un presunto delito contra la salud pública, aunque en este estaba además imputado por un delito de resistencia contra la autoridad y falta de lesiones de un agente de la Guardia Civil. Según el escrito de acusación, los hechos tuvieron lugar el 22 de junio de 2006 en un local de copas de la localidad de Puerto del Carmen alrededor de las 4:00 de la madrugada. Dos agentes de la Guardia Civil han testificado en el juicio que la operación antidroga se había llevado a cabo porque "tenían indicios de menudeo" y que el imputado se resistió a la detención.

Ambos agentes han declarado haber visto la transacción con claridad y aseguran que tras interceptar al comprador, éste dijo que había comprado medio gramo de cocaína, aunque no le fue encontrada ninguna sustancia psicotrópica. Pero durante el juicio, este testigo ha declarado que no recordaba haber adquirido ninguna droga esa noche porque "había bebido un poco", asegurando que no es "consumidor habitual". Asimismo ha asegurado con rotundidad que no conocía al acusado "absolutamente de nada, no lo he visto en mi vida".

La abogada defensora ha solicitado la absolución alegando los principios de presunción de inocencia ya que según considera "no hay elementos ni objetivos ni subjetivos que prueben la culpabilidad del imputado". La letrada ha concluido que la cantidad incautada era muy pequeña con una pureza de 20,2 por ciento. Añadiendo además, que "no está acreditada que la sustancia encontrada perteneciese al acusado porque no se hicieron las pertinentes pruebas químicas". Por otro lado también ha pedido la absolución con respecto al delito de resistencia a la autoridad porque "el imputado no supo que eran agentes de la autoridad". Sin embargo, la Fiscalía ha considerado acreditada la participación en los delitos del acusado basándose en el testimonio de los agentes de la Guardia Civil y la Policía Local.