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Increpa al vigilante de un centro comercial de Lanzarote por reclamarle que se subiera la mascarilla

Una mujer que llevaba la mascarilla por debajo de la nariz llega a acusar al trabajador de "saltarse las leyes" y de "coacción"

Discusión en el Centro Comercial Deiland tras llevar la mascarilla bajada

Dos mujeres han protagonizado un vídeo, que está circulando por las redes sociales, en el que increpan al vigilante de seguridad del Centro Comercial Deiland, después de que éste instase a una de ellas a subirse la mascarilla.

En las imágenes, una de las mujeres reconoce que llevaba la mascarilla por debajo de la nariz y acusa al vigilante de seguridad y a otro hombre de "coacción". Y es que sostiene que no tiene por qué llevar la mascarilla puesta dentro del centro comercial si mantiene la distancia de seguridad. "No hay nadie, está vacío, y vienen estas dos personas a decirme que me ponga la mascarilla sobre la nariz, cuando estoy guardando dos metros de distancia", señala. 

"Es obligatoria", le insiste el vigilante de seguridad, que le recuerda además que Lanzarote se encuentra en nivel 4 de alerta sanitaria. 

"Cuando se puede guardar una distancia de dos metros, yo no tengo obligación de usarla", insiste la mujer, que después argumenta la existencia de un problema respiratorio para no llevarla. Sin embargo, cuando el vigilante le exige un justificante médico, ésta se niega a dárselo. "No tengo por qué darle un justificante médico, porque eso es algo personal", le responde. "Usted no es juez ni médico", se escucha decir a la otra mujer. 

"Si tiene un problema, llame a sus compañeros. A mí no me van a estar acosando ni tú, ni tu, dan media vuelta y me dejan en paz, porque si no sí que voy a llamar yo a la Guardia Civil", llega a decir la protagonista al vigilante de seguridad, al que también amenaza con hacer publicas las imágenes en las redes sociales. "¿Tú sabes cuántos seguidores tengo, te vas a hacer famoso, mi niño", señala la mujer. 

Finalmente, el vigilante de seguridad decide abandonar la discusión, mientras las dos mujeres siguen increpándole y acusándole a él de "saltarse las leyes".