Política

Corujo afirma que casi 20.000 trabajadores de Lanzarote dependen de que continúen los ERTEs "para poder vivir"

La presidenta del Cabildo y diputada regional ha defendido su continuidad en el Parlamento, señalando que 200.000 personas en Canarias y una de cada cuatro personas de la población activa de Lanzarote dependen de ellos

María Dolores Corujo en el Parlamento de Canarias

“Los ERTES protegen en la actualidad a más de 200.000 personas en Canarias y en el caso de Lanzarote, son un mecanismo imprescindible para atender a casi 20.000 personas, lo que representa un 25,75% de la población activa de la isla”. Esas son las cifras que ha puesto sobre la mesa la presidenta del Cabildo de Lanzarote y diputada regional del PSOE durante su intervención este martes en el Parlamento de Canarias, donde ha defendido la necesidad de prorrogar esos Expediente de Regulación Temporal de Empleo.

“Son cifras de una importancia extraordinaria y, si me lo permiten, más aún en el caso de mi isla, en la que una de cada cuatro personas de toda la población activa depende de este mecanismo de cobertura para poder vivir. Por eso, es tan importante saber no sólo durante cuánto tiempo se mantienen, sino su cuantía, pues cualquier reducción se aplicaría sobre sueldos en muchos casos precarios”, ha apuntado.

Durante su intervención, María Dolores Corujo, destacó “la apuesta del Gobierno de España por el mantenimiento del empleo prohibiendo los despidos y favoreciendo los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTES)”, frente a la “extinción masiva de contratos provocada por otras crisis”, y resaltó que esta situación “sin precedentes” ha tenido una respuesta institucional “también inédita”. 

La diputada socialista por Lanzarote preguntó en la Cámara regional por los acuerdos alcanzados en la comisión tripartita laboral acerca de los ERTES por el Ministerio de Trabajo y los agentes sociales y económicos y sus efectos en Canarias, recordando que resulta de “vital importancia” extender la protección de los ERTES “de manera inexcusable” hasta el momento en el que se recupere la actividad económica. 

En este sentido, añadió que el cierre de la industria turística “ha tenido consecuencias que se extienden al comercio, a la hostelería y a todo un tejido de actividades que dependen del turismo como motor”.